Las Competencias Cognitivas Y Afectivas Que El Niño En Edad Preescolar Pone En Juego A Partir De Su Relación Con El Entorno Natural Y Social

“Las competencias cognitivas y afectivas que el niño en edad preescolar pone en juego a partir de su relación con el entorno natural y social”

En este ensayo manifestaré algo de mi visita observación y prácticas, que realicé en el jardín de niños “Cleotilde García” enfocándome al campo de “Exploración y conocimiento del mundo”, el cual nos dice en el PEP que: “está dedicado fundamentalmente a favorecer en las niñas y en los niños el desarrollo de las capacidades y actitudes que caracterizan al pensamiento reflexivo, mediante experiencias que les permitan aprender sobre el mundo natural y social”.

La definición del campo se basa en el reconocimiento de que los niños, por el contacto directo con su ambiente natural y familiar y las experiencias vividas en él, han desarrollado capacidades de razonamiento que les permiten entender y explicarse, a su manera, las cosas que pasan a su alrededor” (PEP 2004)

En esta jornada de prácticas decidí observar a Pilar pues es una niña que no se expresa con facilidad, aunque las veces que he tenido oportunidad de escucharla hablar con su mamá, he notado que si sabe hablar de manera correcta. Pensé que con las actividades que pondría me ayudaría a hacerla sentirse más en confianza, puesto que lo que le noté fue una alta inseguridad al hablar frente al grupo. Pero a lo mejor la niña es así por lo que vive en su familia, porque la mamá también la noté que era muy seria, y como señala Tarradellas Rosa (2001): “el proceso del desarrollo humano se establece al poner en relación toda una serie de factores: genéticos y ambientales”.

En cuanto a las actividades del campo formativo de “Exploración y conocimiento del mundo” apliqué una actividad que tenía que ver con la comparación de objetos antiguos, que les llevé, con los actuales. Esperaba lograr que los niños desarrollaran competencias cognitivas como el recordar, pensar, reflexionar. Además de que Pilar pudiera expresar lo que ella pensaba de los objetos que les lleve. Ella tomó un teléfono antiguo. La estaba viendo y ella observaba el teléfono detalladamente, pero al preguntarle la diferencia de ese teléfono, al que tiene en su casa, simplemente no dijo nada y solo levanto sus hombros como expresando “que no sabía”.

Siento que si tuviera que aplicar actividades en ese grupo, me enfocaría más en situaciones en las que los niños se interesen por algo, y a partir de ahí hagan indagaciones; para poder estimular la expresión oral de Pilar. Como lo dicen Grisovsky y Bernardi (2002): “el docente puede en su propuesta de enseñanza diseñar e implementar actividades que ayuden al grupo de alumnos a preguntarse e indagar sobre los otros aspectos que forman parte de lo social”.

Asimismo siento que la inseguridad de Pilar podría disminuir si se acerca más al medio ambiente.

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