COASTAL POWER CORPUS CHRISTI Ramping Down

Antecedentes.

Coastal Power, una empresa generadora de energía, independiente fundada por Ronald Smith y Derek Blake; su idea: Producir energía a bajo costo y en grandes volúmenes para comercializarla con grandes consumidores y al servicio público. La empresa produce vapor y electricidad. En 1989 Coastal Power tenía tres plantas y decide vender acciones al público, en 1981 se expande adquiriendo dos plantas en Irlanda del Norte, creciendo así internacionalmente, luego adquiere plantas en China, Brasil y Argentina. En el plano nacional continúa con su estrategia de crecimiento y en 1998 adquiriere tres plantas en Texas, entre ellas Corpus Christi. El negocio creció rápidamente y en 2001 obtuvo ingresos por un poco más de $9.300 millones y además empleó a 38.000 personas. Pero ahora los tiempos se tornan difíciles, y desde la crisis energética y el ataque terroristas del 11 de Setiembre de 2001 la utilidades mermaron y Coastal Power ha caído en una crisis financiera, los márgenes de beneficio neto históricos de 15% en 1996 se redujeron a 2.9% a finales del 2001. Por esta razón se ha solicitado a los líderes reducir costos, incluso recortar cosas tan básicas como los servicios de limpieza. Pero no ha sido suficiente y ahora en el 2002 Peter Morris Gerente de Planta trae una propuesta a la junta: “Debemos reducir nuestra fuerza de trabajo en un 10%”.

El Dilema.

“Reducir la fuerza de trabajo en un 10%”, podía ver el impacto que la propuesta generaba sobre los lideres allí presentes. Y es que esa decisión afectaría a trabajadores y familias que habían crecido con la planta y en sus alrededores por más de una generación. Cada uno de los Líderes expresaba su preocupación sobre la propuesta: “tenemos una plantilla tan justa que la desincorporación de cualquier persona podría significar reducir nuestra capacidad para satisfacer la demanda”, y es que parte de la estrategia de Coastal Power era precisamente mantener una fuerza laboral ajustada para evitar despidos. Todos sabían la crisis que estaba atravesando el sector energético, y por tanto en la planta ya se rumoraba la posibilidad de los despidos, los trabajadores estaban angustiados y esto también había afectado su desempeño laboral. Adicional a esto los líderes consideraban que su fuerza de trabajo era especializada y que había sido entrenada allí dentro, la organización había invertido en su preparación, todos eran especialistas en labores integrales para el proceso, que todos funcionaban como un eslabón de la cadena y por tanto eran indispensables. Además había trabajadores que tenían 30 años trabajando en la empresa, lo que hacía más difícil tomar la decisión “resulta difícil pedirle a alguien que se vaya y deje aquí toda su vida al lado de estas calderas” era parte de las expresiones que se oían en aquella sala de juntas. Entonces Morris

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