Discurso De Fin De año

Buenas tardes directivos del colegio, profesores, compañeros, familiares e invitados presentes.

Lo hemos logrado, hoy el colegio nos abrió las puertas por última vez, luego de prácticamente vivir aquí por trece años. A lo largo de este tiempo, hemos experimentado todo lo que un ser humano puede sentir, tantas risas y alegrías vividas entre nosotros, pero también tristezas y penas, que dolorosamente tenemos que llevarnos como recuerdo del colegio. Tanto las penas como alegrías nos han permitido unirnos y permanecer siempre juntos como el grupo humano que conforman estos cursos.

Causa conmoción vernos a todos nosotros aquí, todas estas caras que conocemos de hace tanto tiempo, sentados y muy ordenados con la corbata de Los Nogales, licenciándonos del último año escolar, siendo que aún muchos tienen el recuerdo vivido de la graduación de Kinder. Se cumplen trece primaveras desde que se enlazaron nuestras manos para emprender el camino que culminamos esta tarde, con manos que se soltaron en este largo caminar, pero con otras nuevas que se fueron agregando y se aferraron firmemente, para continuar caminando y convertirnos en lo que somos ahora, jóvenes con ansias de salir al mundo y experimentar vivencias nuevas y diferentes, también optar por distintos caminos y sueños, pero siempre recordando que todos partimos de un mismo lugar. Es en éste donde aprendimos día a día junto a una serie de personajes que se vieron involucrados directa o indirectamente en nuestro peregrinar.

Desde la persona que nos recibía en la entrada hasta quien los guiaba en la sala de clases, los profesores. A ellos debemos agradecer por habernos entregado las herramientas con que podremos enfrentarnos a la vida y a este futuro incierto que se nos avecina. Queridos, o tal vez no tanto, es importante señalar que tendrán un espacio en nuestra memoria, ya que fueron muchos los momentos compartidos y las experiencias que nos enriquecieron no tan sólo con materia y más materia, sino que también en la formación de seres humanos que piensan y sienten, con el anhelo de la integridad personal y de seguir surgiendo.

Por otro lado, cabe destacar lo que si nos podremos llevar con mucho amor de este recinto, el haber convivido con cada uno de ustedes, compañeros, seres humanos y no máquinas, cada uno con diferentes cualidades y personalidades que enriquecían a este grupo dándole la identidad y unidad que hemos logrado. Como no mencionar a los metaleros, a Inconprod, al Gap, a las topísimas, los pokemones, los Yersey, o a los que no pertenecemos a ninguno de los anteriores, pero que en los últimos días logramos formar parte de uno solo, los cuartos Cholos.

Pasamos de ser cursos mixtos, a cursos de hombres y mujeres, luego volvimos a juntarnos, y después retornamos a nuestra separación anterior, donde destacó en toda la enseñanza media el carisma

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