ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Ejes Transversales


Enviado por   •  16 de Febrero de 2014  •  2.344 Palabras (10 Páginas)  •  267 Visitas

Página 1 de 10

Introducción

La educación moral inculca los hábitos de pensar y actuar que ayudan a las personas a convivir y trabajar juntas como familia, amigos, vecinos, comunidades y naciones.

La educación moral es un proceso de aprendizaje que permite a los estudiantes y adultos en una comunidad escolar comprender, practicar e interesarse por los valores éticos fundamentales tales como el respeto, la justicia, la virtud cívica y la ciudadanía, y la responsabilidad por sí mismo y por el prójimo. Sobre tales valores fundamentales, se forman las actitudes y las acciones que son propias de las comunidades seguras, saludables e informadas que sirven como los cimientos de nuestra sociedad.

Durante su juventud, los estudiantes pasan muchas horas de la vida en el salón de clase. El tiempo que se encuentran en la escuela constituye una oportunidad de explicar y reforzar los valores fundamentales sobre las que se forma el sentido moral.

En la escuela, la educación moral debe abordarse de manera integral de modo que se abarquen las cualidades emocionales, intelectuales y morales de una persona y un grupo. Debe ofrecer múltiples oportunidades a los estudiantes para conocer, discutir y practicar conductas sociales positivas. El liderazgo y la participación de los estudiantes son imprescindibles para que la educación moral se incorpore a las creencias y las acciones de los estudiantes.

La moral

La moral es definida como el conjunto de valores, costumbres, creencias y normas de un determinado pueblo o incluso individuo. La moral es una guía para distinguir lo bueno de lo malo, lo correcto de lo incorrecto. La moral no es algo estático, ya que depende del contexto histórico y la cultura en particular que se trate.

Algunos ejemplos de moral son:

Ceder el lugar en el trasporte público a mujeres embarazadas, a personas con niños o mayores.

Hacer la fila para esperar al colectivo.

No hacer trampa en juegos o exámenes.

Decir la verdad.

Ayudar a una persona ciega a cruzar la calle.

En caso de emergencia llamar a la policía, ambulancia, bomberos, etc.

Ser amable con la gente que atiende en los servicios públicos, comercios, etc.

No perjudicar la libertad de los demás.

Escuchar las personas cuando me hablan, sin importar quienes sean o de donde provengan.

Respetar la libertad de culto y expresión de los demás.

No difamar a otras personas.

Cuidar el medio ambiente.

No fumar en lugares públicos, sobre todo si hay niños o personas que sufren de enfermedades respiratorias.

No engañar a los demás, sean simple desconocidos, familiares, amigos o la misma pareja.

Ayudar a alguien que lo requiera.

No hacerles a los demás lo que no te gustaría que te hagan.

Avisar en caso de llegar en retraso o no poder hacer asistir a un lugar que había sido acordado.

No decir malas palabras o groserías, sobre todo enfrente de mayores.

Presentarse ante los desconocidos.

Saludar con un beso en la mejilla o estrechando la mano.

Tolerar a los demás, sea por sus diferencias, distintos gustos, andar más lento, entre muchas otras.

Respetar a todas las personas y seres vivos, sin hacer diferencias.

No prejuzgar a las personas, es decir no emitir juicios anticipados de otros individuos.

Vestirse cuando se está en la calle o lugares públicos.

Ser responsable con las tareas que nos delegan o tomamos voluntariamente.

Honrar a la nación a la que se pertenece.

Amar y resguardar la seguridad de los hijos.

No burlarse de las personas que lloran o sufren

La educación moral

Obviamente, que sin la vigencia de valores universales como la igualdad y la justicia no puede haber ciudadanía. En ese sentido, la educación moral desea formar criterios de convivencia que refuercen valores como la justicia, la solidaridad o la cooperación, además de convertirse en un ámbito de reflexión individual y colectiva.

Las cuestiones valorativas tienen, pues, diversas dimensiones, pero constituyen el fundamento que permite responsabilidades en una sociedad pluralista, en la que las propias creencias y valoraciones han de convivir en el respeto a las creencias y valores de los demás.

Aún más: los valores, impartidos por una educación moral, pueden generar en los individuos la suficiente capacidad de raciocinio y equilibrio emocional para sentirse realizados y plenamente felices.

Por otro lado, la democracia es un sistema político de fuerte contenido moral, ya que nos permite plantear de forma justa los conflictos de valor que genera la vida colectiva, por tanto la democracia es un valor fundamental cuya persecución justifica holgadamente la preocupación por la educación moral.

Podría decirse que la educación moral es el eje en torno al cual se articulan el resto de temas transversales. Siendo su finalidad el desarrollo integral de las personas, es necesario que no se limite a la adquisición de contenidos intelectuales.

Es la educación moral que convierte a los individuos en personas, en ciudadanos locales y universales, en seres libres, sociables, felices y responsables.

"La felicidad social deriva de la justicia social", solía argumentar el tratadista vienés Hans Kelsen.

Necesidad de la educación moral

Por consenso se admite que una persona en sus primeras etapas de desarrollo y como consecuencia de su relación

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (14.9 Kb)  
Leer 9 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com