La Suprema Felicidad Social

Ensayo: La Suprema Felicidad Social

Para llegar al concepto de la Suprema Felicidad vamos a conocer primero que La Felicidad es un objetivo a realizar, no algo que puede sobrevenir circunstancialmente. Es un bien supremo, el mayor bien al que puede aspirar un individuo en el uso de la razón a lo largo de su vida y que debe perseguirse a través de unas determinadas actividades, de unas acciones prácticas.

El Hombre es por naturaleza una realidad social y su recorrido hacia la felicidad individual deberá participar necesariamente de aquellos bienes que son comunes. De ese modo la subjetividad moral debe proyectarse en el espacio público, en la política, que es la que garantiza la permanencia y reproducción de aquellos bienes necesarios.

Las bases de esta estructura social incluyente están contenidas en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en las tradiciones de nuestro pueblo venezolano y en la política del gobierno de construir un país Socialista.

Para ello las relaciones de producción deben estar basadas en formas de propiedad social, en la que exista la propiedad de autogestión asociativa y comunitaria, respetando las formas de propiedad individual y pública

De igual manera la estructura social está actualmente ordenada jerárquicamente en cuanto al poder, la riqueza, el conocimiento y el prestigio, determinando situaciones de la satisfacción de las necesidades sociales, distribución de la riqueza e ingresos, estando en proceso de transición con el programa de las misiones en forma masiva y acelerada financiadas por las rentas petroleras, hacia una formación económico-social más incluyente, lo que ha permitido satisfacer las necesidades de identidad, alimentación, salud, educación, vivienda y empleo.

En cuanto a la diversidad biológica, de edad, étnica y de género se ha permitido avanzar hacia la superación de las diferencias y de la discriminación entre el trabajo físico e intelectual, reconociendo al trabajo como única actividad que genera valor y que legitima el derecho de propiedad, ya que en la medida en que los trabajadores en Venezuela contribuyan con la producción de la riqueza social según sus capacidades aumenta las probabilidades de satisfacer las necesidades sociales.

Del mismo modo la inclusión social es personalizada para los grupos sociales en situación de máxima exclusión social, permitiendo el autodesarrollo de las personas, las comunidades y sus organizaciones.

En cuanto a la profunda desigualdad entre el campo y la ciudad es necesario equilibrar las relaciones urbano-rurales creando un nuevo modelo de ciudades socialistas panificadas e integradas de manera sostenible con la naturaleza, permitiendo que el hombre se reconcilie con el medio ambiente, a través de la educación ambiental a nivel de todos los estratos sociales y niveles

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