La Teoría Del Enemigo Público Como Medio Legitimador Del Conflicto Armado En Colombia

LA TEORIA DEL ENEMIGO PUBLICO COMO MEDIO LEGITIMADOR DEL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA

I.INTRODUCCION II. ACEPCIONES Y GENERALIDADES DEL CONFLICTO ARMADO III. DEL CONFLICTO ARMADO Y SU RELACION CON LOS FINES ESENCIALES DEL ESTADO IV ROUSSEAU, EL CONTRATO SOCIAL Y EL CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA V.CONCLUCIONES VI. BIBLIOGRAFIA

I. INTRODUCCION

Se pretende abordar la teoría rousseauniana del enemigo público desde la perspectiva del conflicto armado Colombiano, para ello aparece como una necesidad tangible el conectar desde el ordenamiento jurídico interno, pasando por las teorías expuestas por Luis Prieto Sanchis en relación con la validez y la eficacia de las normas jurídicas haciendo un análisis en conexidad con la legitimidad de las superestructuras que se erigen dentro y fuera del Estado como Sistema Juridico.

En esta medida se pretende citar la teoría de la justicia y el interés público de Luciano Parejo Alfonso para explicar a partir de allí los fines del Estado Colombiano en relación con la teoría Rousseauniana.

II. ACEPCIONES Y GENERALIDADES DEL CONFLICTO ARMADO

Según Pedro Pablo Camargo, los conflictos se gestan “… Por las más diversas causas: el poder, la etnia, la religión, las venganzas, las rivalidades, la ideología, la raza, la propiedad, el vasallaje, la opresión.”

Existen varias teorías y concepciones en torno al conflicto armado interno en Colombia; por su parte hay quienes afirman que la naturaleza de dicho conflicto puede ser definida como una guerra civil mientras que otros prefieren tachar de inadecuada dicha concepción del conflicto.

Así mismo algunos autores afirman que la justificación de este conflicto se aleja por completo de las cuestiones y relaciones étnicas y se alega pues el tinte ideológico del cual se tiñe nuestro conflicto armado interno.

III. DEL CONFLICTO ARMADO Y SU RELACION CON LOS FINES ESENCIALES DEL ESTADO

Después de acercarnos al concepto de conflicto armado gracias a las teorías de algunos autores, aparece como necesario relacionar dicho fenómeno presente en nuestro territorio con la teoría de los fines esenciales del Estado contemplados dentro de nuestra Constitución Política.

Si articulamos estas pequeñas acepciones de conflicto armado Colombiano, con los fines esenciales del Estado, encontraremos pues como uno de las máximas de este es el “garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes”.

En esta medida aparece como una obligación del Estado Colombiano el asegurar la integridad física y moral de las personas, un medio ambiente sano, el derecho a la vida de toda la población sin discriminación alguna (entre muchas otras que no son relevantes para el tema que aquí se pretende tratar), en otras palabras encaminar su actuación en pro del interés general*. El Estado en su legítimo* actuar deberá enfocar dicha actuación con el fin de integrar las superestructuras que se erigen al margen del Estado como Sistema Jurídico (entiéndase como los grupos armados al margen de la ley) o ante su nocividad para el mismo propender por su erradicación.

Aparece como indispensable el aludir a la teoría de las superestructuras; en ella se entiende al Estado como Sistema Jurídico como una gran estructura dentro de la cual se erigen superestructuras que se ven limitadas por la primera.

Así mismo esta teoría reconoce la existencia de superestructuras que se originan al margen de esta gran estructura; para el caso concreto se deberá en primer lugar propender por integrar estas superestructuras atípicas al Estado como Ordenamiento Jurídico o en su defecto y teniendo como punto de partida el asegurar la supervivencia del Estado, erradicarlas.

Aludiendo a lo anterior el Estado encuentra como un derecho y como una obligación el desarticular a los grupos armados al margen de la ley bien sea mediante la integración (desmovilización) o la erradicación

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