Trata De Personas En México

México actualmente es un país en el que transitan y radican migrantes irregulares y/o indocumentados que se dirigen hacia Estados Unidos y en menor flujo a otros países, procedentes por lo regular de Centroamérica y algunos mexicanos que se suman al número de emigrantes para conocer el denominado “sueño americano”, sin prever el riegos que pueden tener.

Lo anterior ha contribuido al aumento de la trata de personas sobre todo en mujeres, niñas y niños, con fines de explotación laboral y sexual, lo que en un principio genera la violación de los derechos humanos fundamentales de dichas personas.

La trata de personas es considerado un problema social por su complejidad, por lo que es necesario su atención y prevención contra éste delito.

Actualmente existen diferentes tipos de trata a los que se debe dar atención, es sabido que el más común y antiguo es el de mujeres, sin embargo, en los últimas años se ha dado la trata de niñas y niños con fines sexuales, infantil laboral y fines laborales en general (mujeres, niñas, niños, adolescentes).

El flujo migratorio en la República se da en la frontera sur de México, en donde también existe la trata de personas, principalmente en la zona de Soconusco, Chiapas.

Para darle un mejor seguimiento de la trata de personas en México es necesario que a nivel regional se cree la Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia Contra las Mujeres y Trata de Personas (FEVIMTRA), ya que a nivel estatal es difícil dar seguimiento a los delitos, ya que no existe un Ministerio Público o juez que determine un fallo a favor de las víctimas.

Aspectos generales de la Trata de Personas

La trata de persona1 es un problema antiguo el cual data de finales del siglo XIX e inicio del siglo XX denominado como “trata de blancas” concepto que hacía referencia al comercio de las mujeres que servían como prostitutas, mismas que eran engañadas, secuestradas y obligadas a prestar servicios sexuales.

Fue hasta inicios de 1980 cuando se comenzó a utilizar el término de tráfico humano o tráfico de personas refiriéndose al comercio de mujeres y personas menores de edad, fue hasta finales del siglo XX que la comunidad internacional logró establecer un concepto y/o definición sobre este delito.

Al respecto, los avances tecnológicos han permitido informar su expansión y múltiples formas en todo el mundo, por lo que es frecuente encontrar en los diversos medios de comunicación temas que hablen sobre éste delito, entre los que se destacan:

• Trata de mujeres para el mercado matrimonial, entre países asiáticos o desde Latinoamérica, Asia y África hacia Europa, Japón y los Estados Unidos.

• Caravanas de mujeres movilizadas en contra de su voluntad o bajo condición de trata e instaladas en las cercanías de bases militares para entretenimiento y uso sexual de oficiales y soldados.

• Mujeres en condición de trata explotadas como mano de obra barata y que trabajan sin ninguna protección laboral en sectores específicos como el empleo doméstico o la industria sexual.

• Mujeres ofrecidas como esclavas en sitios de Internet, donde se les promociona explicando su capacidad y resistencia al dolor, a la tortura y todo lo que puede hacerse con ellas.

• Miles de mujeres atraídas por un supuesto contrato de trabajo rentable y que terminan destinadas a burdeles o clubes nocturnos de diferentes lugares del mundo.

• Mujeres y niñas provenientes de áreas rurales que son vendidas y coaccionadas para llenar la demanda de turismo sexual.

• Anuncios y promociones turísticos sobre mujeres y niñas exóticas a las que se puede acceder fácilmente en un vuelo chárter con todo incluido 2.

Este fenómeno es difícil de establecer con cifras o estadísticas, sin embargo la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), estima que cada año un millón de hombres, mujeres, niñas y niños son engañados, vendidos,

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