El Coleccionista De Huesos

EL COLECCIONISTA DE HUESOS

El Principio de Locard se suele expresar así: "siempre que dos objetos entran en contacto transfieren parte del material que incorporan al otro objeto". El principio ha permitido obtener indicios relevantes en numerosos lugares, desde huellas en el barro o sus restos en neumáticos y calzado, hasta huellas dactilares o restos en las uñas.

Los principios de Intercambio de LOCARD, establece cuatro puntos muy importantes al momento del levantamiento del cadáver; el cual, está relacionado con la película que es materia de análisis:

1.- El agresor se lleva rastros de la escena y de la Víctima.

2.- El agresor deja rastros en la escena y en la víctima.

3.- La Víctima se queda con rastros del agresor y de la Escena.

4.- La Escena puede dejar rastros en el agresor y en la Víctima.

Si aplicamos los principios de Intercambios de Locard, nos damos cuenta que el agresor - un asesino psicópata- de esta película, dejaba rastros en la escena y en la víctima, junto a pistas para que sean descifradazas y lo conlleven a la comisión del siguiente delito.

En el primer crimen, el agresor, secuestra a una pareja de esposos, asesinando a uno de ellos, dejándolo a la altura de los rieles del ten; entre las evidencias encontradas se encuentran, un tornillo industrial que estaba sobre uno de los rieles del tren, un montón de polvo blanco, que parecía arena de asbesto, un trozo de papel periódico con fecha de 1913 y hora de edición 4:00 p.m., un trozo muy pequeño de papel blanco que tenía una pequeñas marcas en color negro, un trozo más de papel que tenía escrito el número 119, en la mano que tenía el dedo mutilado estaba el anillo de la esposa del sujeto y una bala en el cuerpo del sujeto.

En el segundo asesinato, el agresor mata a la esposa de quien fuera asesinado primero, todas las evidencias los llevan a unas calderas que se ubican bajo la ciudad. En esas calderas el asesino torturaba a su víctima haciéndole saber que la mataría con...

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