Educación En El Mundo Griego

La educación se considera como la luz del conocimiento que nos lleva a un reacomodamiento de lo cognoscible que conduce a la idea del bien.

El bien es el arte de mostrar el alma, que esté a la vista con lo que se conoce y se ha hecho luz de los que saben hacia los que no saben. Lo anterior es una forma democrática, donde todos tienen derecho a la educación, siendo una democracia social, es decir, que no se puede quedar la educación estancada a unos cuantos, ya que como dice Platón y lo reafirma Aristóteles, la educación es la formación del individuo hacia un bien dentro de la comunidad, siendo la conducción del hombre hacia la consolidación del estado.

Todo individuo al momento de recibir la luz del conocimiento y siendo éste bien mostrado ayuda a que se presente la armonía en la comunidad, por lo que al momento de educar es necesario tener formación ética, artística e intelectual.

Cada una de las áreas antes mencionadas, tienen una finalidad como lo platearon los grandes filósofos griegos estudiados. Estas figuras de la filosofía fueron conductores, formando para el servicio del estado.

Platón menciona que la naturaleza del alma apela al razonamiento y a la inteligencia para así examinar cada cosa que se transmite al momento de educar. Lo anterior hace una revisión en donde se utiliza la inteligencia, que nos conduce a discernir lo importante de lo menos importante.

En la disciplina de la ética, se hace alusión a todas aquellas normas que conducen al bien o a la felicidad, tanto personal como social, ya que son una serie de normas que conducen al individuo a homogeneizar ciertas conductas para el bien del estado.

Así mismo la disciplina de las artes, donde se incluye la parte científica y artística, implica para los griegos una formación sumamente importante, donde se educa el carácter y la conducta.

Para los griegos era indispensable la formación musical para la formación del carácter, Platón comenta que ésta disciplina al momento de tener un ritmo, música y letra, forman el carácter. Aristóteles por su parte considera a la música como una actividad donde se recrea el hombre mostrando una parte la formación del buen criterio y la capacidad de juicio.

También se dice que la formación del cuerpo es parte de las artes ya que el cuidado del mismo lleva a la templanza como virtud y eso solamente se obtiene con la formación del carácter.

Platón considera que dentro de la formación ética no es bueno corromperse por las dádivas ni aumento de las riquezas ya que esto no lleva al bien.

La educación tiene una finalidad, que es educar para la vida como lo hace saber Aristóteles. La educación sirve para guiar al individuo hacia una serie de acciones que conducen a una vida digna, es decir de valores, por lo que la educación no es un instrumento para cualquier vida, como puede ser la vida del delincuente, marginado social o el ignorante, es para todo aquel que desea conducir el alma hacia el bien.

La vida es para un realizar un fin último individual, donde se hace uso de la razón y de la inteligencia, para desarrollarse de forma racional. Puesto que en el hombre existen dos formas de conducirse, la racional es la que conduce al conocimiento y la irracional que es la que se deja llevar por las pasiones. La parte irracional puede ser controlada por la parte racional acomodando así las pasiones al dictado de la razón.

Lo anterior conduce a reflexionar acerca de la forma de conducirse a un fin último con entereza, haciendo un bien llevando una vida digna y satisfactoria a todo individuo.

La educación para lograr el fin último que es la felicidad y la vida digna de todo individuo, hace posesión de los hábitos y de la razón, ambos deben estar en armonía. Lo anterior es indispensable para formular la escala del bien y la escala de las pasiones, dolores y emociones, es decir que la armonía entre los hábitos y la razón debe generarse un ajuste en dichas escalas.

Por lo tanto, la educación inicia con la formación de hábitos dados por las reglas sociales contenidas en la constitución de cada pueblo y una vez que se han aprendido los hábitos se hace uso de la razón para así poder asumirlos.

Tanto Platón como Aristóteles consideran que el responsable de la educación es el Estado, ya que los individuos son educados, como ya lo hemos dicho, es conducir al hombre para que sean útiles al Estado. Por lo que el Estado debe ser el responsable de la educación desde la infancia de cada individuo. En cuanto a los contenidos de la misma, asume en líneas generales el tipo de educación y los contenidos socialmente establecidos en la práctica educativa ateniense que incluía la Gimnasia o educación física, las Matemáticas elementales y las Humanidades, incluida la formación musical, a la cual le concede Aristóteles una gran importancia para la formación del carácter y para la vida posterior en la edad adulta.

Para Aristóteles la educación tiene tres principios:

1.- Debe ser pública y para todos los individuos, es el modo de vivir acuñado constitucionalmente el que exige que todos reciban el mismo tipo de educación.

2.- La educación debe de acomodarse a los principios constitucionales del Estado.

3.- Conducir a la paz y el ocio.

En resumen, Platón considera que la educación a los individuos es para llevar al estado en conjunto y a cada individuo a la realización del bien, considerando al individuo el que puede llegar a puestos políticos y ha sido educado con los disciplinas necesarias y correspondientes, llevará al Estado como gobernante, al bien social.

Aristóteles por su parte, comenta que el fin de toda educación es no permitir que el ocio se apodere del individuo por lo cual el Estado deberá ser el responsable de dar educación a los infantes y a toda aquella persona de diferente edad que necesite educación para hacerlo una persona honorable.

Ambos filósofos coinciden en que es necesario el adiestramiento en las disciplinas de la ciencia, arte y humanidades.

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