El Tren De La Vida
Enviado por jacobomerced • 25 de Octubre de 2014 • 418 Palabras (2 Páginas) • 422 Visitas
Universidad del Este
Programa AHORA
Recinto de Cabo Rojo
El Tren de la Vida
Reflexión Taller Dos
QYLE110
Jacobo R. Merced Robledo
Dr. Wilmer Estrada Cruz
Martes, 16 de septiembre de 2014
El Tren de la Vida
Por mucho tiempo se ha comparado el transcurso de la vida con el viaje de un tren. Aunque parezca algo cursi, la vida se puede explicar como un tren que comienza su viaje cuando nacemos y llega al final del trayecto cuando morimos. El viaje del tren comienza con la locomotora sola y poco a poco va ganando vagones a medida que pasa el tiempo, igual que nosotros, que vamos ganados experiencias y conocimientos a través de nuestra vida.
Por un lado se dice que mientras más carga y vagones tenga el tren más pesado y lento será. La sobrecarga le podría costar tiempo, dinero y hasta podría impedir que se llegase a sus destinos. Por otro lado, si se escoge bien la carga y se balancea su peso, el tren se convierte en uno ágil y de fácil manejo. Hasta podría ayudar a alcanzar los destinos, más seguro y rápido.
La vida, la podemos explicar de la misma manera. Todas las cosas negativas que vamos acumulando a través de ella, sean conscientes o inconscientes, son la sobrecarga en el vagón. Esta sobrecarga se va acumulando poco a poco, y siempre llega el momento donde te impedirán proseguir tu camino, harán lento tu progreso y podrían detenerte por completo. Está en uno, escoger bien las batallas que queremos luchar, los amigos que queremos tener y tratar de eliminar todas esas cargas negativas que no construyen nada y que por el contrario atrasan nuestro viaje.
No podemos pensar que siempre tendremos la carga balanceada y que seremos agiles en nuestro camino, pero si podemos estar conscientes que, durante el camino nos sobrecargaremos en algún momento, y que podamos reconocerlo y actuar sobre ello. Que sepamos identificar las cosas negativas que nos hacen daño, no importa de donde vengan, y tener la fuerza de eliminarlas de nuestra vida o por lo menos no darle importancia para que no nos afecten.
En fin, cuan ágil o pesado sea nuestro viaje solo dependerá de nosotros mismos. Dependerá de cuan efectivos seamos identificando esas personas o situación que nos sobrecarguen. En la medida que aprendamos a no detenernos ante esas situación, nuestro viaje será uno más liviano y placentero.
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