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Clasificación de las Falacias.


Enviado por   •  2 de Marzo de 2015  •  Ensayos  •  1.694 Palabras (7 Páginas)  •  262 Visitas

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“Clasificación de falacias”

Clasificación de las Falacias.

1) Falacias formales:

a) Falacias por afirmación del subsecuente: Uno de los argumentos deductivos válidos más utilizados es el conocido como modus ponens (que afirma), en el que interviene el conector "Si... entonces..." ("Si A entonces B", siendo A el antecedente y B el consecuente). El modus ponens es una regla lógica válida de la lógica elemental de enunciados, cuya estructura es la siguiente:

“Si A entonces B. A. Por tanto, B.”

b) Falacias por negación del subsecuente: Otro de los argumentos deductivos válidos más utilizados es el conocido como modus tollens ("que niega"), en el que interviene también el conector "Si... entonces..." ("Si A entonces B", siendo A el antecedente y B el consecuente). El modus tollens es una regla lógica válida de la lógica elemental de enunciados, cuya estructura es la siguiente:

“Si A entonces B. No es cierto B. Por tanto, no es cierto A.”

c) Falacias de la falsa disyunción: La falacia del falso dilema consiste en llevar a cabo una simplificación: en lugar de señalar la existencia de más alternativas, se reducen las alternativas a dos, de tal modo que, necesariamente, o se da una de ellas o se da la otra.

“O estás conmigo o estás contra mí”

2) Falacias informales contra el criterio de claridad:

a) Falacias de la ambigüedad: El lenguaje natural que utilizamos contiene palabras o expresiones que tienen más de un significado, es decir, contiene palabras o expresiones ambiguas. Así, por ejemplo, el término "gato" tiene varios significados: puede hacer referencia a un animal o puede referirse a una herramienta. Por eso, cuando incluimos este término en una frase, como cuando decimos "El gato no está en el coche", no queda claro lo que queremos decir y tenemos que recurrir al contexto para entender su significado. Existen 3 formas de ambigüedad:

• por usar términos equívocos (caso de la polisemia, que refiere a conceptos totalmente distintos; gato);

• por usar términos análogos (ley, libertad: se refieren a ideas semejantes pero no iguales, es un problema de laxitud);

• y por usar expresiones sintácticamente ambiguas (llamada imprecisión, que provoca dos interpretaciones correctas pero distintas: "el perro de mi padre no se levanta"; "los jugadores cobran un millón").

b) Falacias de la vaguedad: En el lenguaje natural que utilizamos existen términos imprecisos, con un significado que no está definido con total exactitud. Son términos que se refieren a propiedades que las cosas tienen en diferente grado, tales como "alto", "calvo", "bello" o "frío". Así, por ejemplo, no podemos determinar con exactitud cuántos pelos le faltan a alguien para ser considerado "calvo", o cuántos grados tiene que tener una bebida refrescante para ser considerada "fría". A tales términos se les denomina vagos. Aunque los usamos en bastantes ocasiones sin problemas, puede ser que el uso de alguno de los términos vagos que contiene el lenguaje natural no sea adecuado cuando estamos argumentando, ya que puede conducirnos a construir argumentos falaces.

3) Falacias informales contra el criterio de suficiencia.

a) Falacias por generalización precipitada: La falacia por generalización precipitada es aquel error en la argumentación que se produce cuando se establece una conclusión a partir de una base insuficiente de datos. A partir de una serie insuficiente de casos que son similares, establecemos una conclusión general para todos los casos.

b) Falacias de la pendiente resbaladiza: el razonamiento nos lleva (erróneamente, por eso es una falacia) a un peligro que deseamos evitar y, para detenerlo tenemos que impedir que la bola descienda por la pendiente resbaladiza.

Esta falacia se basa en la existencia de una cadena de sucesos, conectados entre sí en una relación de causa a efecto: Si ocurre A1 (causa) ocurrirá A2 (efecto). A su vez, si ocurre A2 (causa), ocurrirá A3 (efecto) y así sucesivamente, si ocurre An-1 (causa), ocurrirá A n (efecto). Ahora bien, An es algo que no queremos que ocurra, porque es algo que representa un gran peligro, similar a la gran bola de nieve que está a punto de impactarnos. Por tanto, si no queremos que ocurra An lo que no tendría que haber ocurrido nunca es A1. En este caso, A1 es como una bola de nieve pequeña, que aun tenemos poder para detener porque no supone ningún problema.

c) Falacias post hoc, ergo proter hoc (después de, luego a causa de): se produce cuando se afirma que un acontecimiento es causa de otro, aunque en realidad se trata de una falsa causa.

d) Falacia "ad ignorantiam" (recurso a la ignorancia): La falacia por recurso a la ignorancia se produce cuando se pretende que la falta de pruebas (a favor o en contra) de una proposición garantiza que esta proposición es verdadera o falsa.

Alguien puede pensar que una proposición es falsa ya que no se ha podido demostrar, al menos hasta ahora, que es verdadera. Por el contrario, alguien puede pensar que una proposición es verdadera porque nadie ha conseguido, al menos hasta ahora, demostrar que es falsa.

e) Falacia de la composición-división: Las falacias de la composición y la división son dos tipos de falacias que tienen que ver con la relación entre una totalidad y las partes que la componen (relación todo-partes).

En el caso de la falacia de la composición, lo que se pretende es que, en la conclusión, el todo tiene que tener las mismas

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