Pruebas De La Existencia De Dios Y Del Alma, Fundamentos De La Metafísica

Al principio del capítulo, Descartes aclara que sus primeras meditaciones pecan de ser metafísicas y que puede ser que no sean del agrado de todos. Ya que los sentidos a veces son engañosos, es recomendable no cerrarse únicamente a lo que se percibe ya que puede ser que las cosas sean diferentes a como los sentidos nos las pintan.

Algo que a mi parecer es muy cuestionable, es que Descartes afirma que lo aprendido por medio de libros y por experiencias personales no son más seguras que las ilusiones de los sueños. Personalmente pienso en una mayor veracidad de los hechos comprados en la vida real en comparación con las simples ilusiones de nuestros sueños.

El autor al principio seguía ciegamente el postulado “pienso luego existo”, sin embargo, se hizo a la tarea de replantear sus principios, entonces llegó a la siguiente conclusión: cada ser humano es una substancia, cuya naturaleza o esencia es el pensamiento, y el pensamiento no necesita de ningún lugar para existir y tampoco depende de alguna cosa material. De esta manera “comprueba” la existencia del alma, ya que afirma que el alma es algo muy diferente al cuerpo, y no depende de él para existir.

Se postula la siguiente ley general: las cosas concebidas como claras y distintas son en su totalidad verdaderas. Entonces, lo difícil consistiría en determinar que cosas son claras y diferentes.

Descartes no podía aceptar la existencia de alguien más perfecto que él (ser humano) y menos que este ser surgiera la de la nada. Después, pensó que pudiera ser aspectos que no conociera de la perfección, y de este modo, pudiera haber alguien que cumpliera con todas las formas de perfección (incluyendo las ignoradas por Descartes).

Este autor afirma que en esta en la naturaleza de Dios el no tener defectos, al contrario, Él no tiene nada de imperfecto. Si existen otros seres “perfectos”, éstos no pueden subsistir sin la presencia de Dios.

Algo en que no concuerdo con Descartes, es cuando dice que las personas que dudan en la existencia de Dios es porque su pensamiento va más allá y no pueden imaginar más de lo que ven. Yo pienso que pasa lo contrario, por lo regular, las personas que cuestionan la existencia de Dios, son individuos que han estudiado mucho y tienen argumentos sólidos para dudar en ese ser perfecto. Otro afirmación de Descartes (de los católicos y seguidores de otras religiones) es el hecho de que todos nosotros procedemos de Dios.

Por último, se afirma lo siguiente: ya que nuestra ideas y nociones son dadas por el ser perfecto (Dios), todas deben tener algún fundamento de verdad.

Bibliografía

Descartes, “Cuarta parte: Pruebas de la existencia de Dios y del alma, fundamentos de la Metafísica” en Discurso del método. Editorial Porrúa, México 1992, pp. 21-24.

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