¿Hasta Qué Punto El Zapatismo Constituye Un Movimiento Social En América Latina?

Desde el inicio de los tiempos, el ser humano se ha caracterizado por ser un individuo político que busca encontrar en la organización social un mecanismo de protección e impulsión de derechos y obligaciones que lo lleven a desarrollarse a plenitud. Sin embargo, la codicia y ambición han sido constantes generadoras de conflictos a lo largo de la historia que han desembocado en la pérdida del significado y propósito de las organizaciones estatales. En las últimas décadas, una serie de células o colectividades se han ordenado en forma de movimientos sociales con el fin de proteger y promover aquellos valores e ideologías vulneradas previamente por las luchas de subsistencia que se han librado en el globo terráqueo. La Revolución mexicana y la actualidad que se ha tejido a partir de ésta, no ha sido ajena a estos conflictos y la lucha que han librado algunos sectores sociales por proteger y salvaguardar sus ideales. El propósito del siguiente ensayo es establecer hasta qué punto el llamado “zapatismo” constituye un movimiento social en América Latina. Lo anterior será llevado a cabo mediante la implementación de una serie de fuentes históricas, científicas y sociales que den como resultado un análisis crítico del tema a tratar.

En primera instancia, es necesario hacer un recorrido por el zapatismo para de este modo lograr una mejor comprensión de sus nexos con los movimientos sociales contemporáneos en América Latina. El zapatismo es un movimiento devoto de los ideales promulgados por Emiliano Zapata, el principal “caudillo” de la Revolución mexicana. En su lucha, Zapata batalló por el reconocimiento campesino y sus derechos que habían sido ultrajados por el régimen de Porfirio Díaz. Durante la dictadura “porfirista”, México fue un país que gozó de un notable crecimiento económico a costas de una serie de detrimentos sociales que eran sufridos por las clases pobres y rurales del país. Emiliano fue el abanderado de la clase agredida por el gobierno autoritario y enfocó su lucha en la recuperación y respeto por las tierras que trabajaban los campesinos; hecho que se refleja en una de sus frases más famosas: “La tierra es de quien la trabaja”.

Por otra parte, es de vital importancia hacer referencia a la definición de y causa de los movimientos sociales para darle continuidad y profundidad al estudio propuesto. Un movimiento social es un conglomeración de personas que intentan desarrollar una serie de ideales políticos y comunitarios con el fin de lograr un cambio. Congruentemente con lo hasta ahora expuesto, Mónica Bruckmann complementa haciendo énfasis en que son el resultado de una serie de modificaciones a los sistemas sociales que se han generado a consecuencia de los conflictos que han surgido en el continente.

En concordancia con lo anterior, el zapatismo que se genera a partir la Revolución mexicana debe ser analizado en el ámbito de un movimiento social para de esta manera establecer si efectivamente existe un vínculo coincidente o colindante entre ambas entidades descritas y estudiadas en párrafos antecesores. Según Alain Touraine, todo movimiento social –o por lo menos gran parte de ellos- se desprende de un conflicto, ya sea armado, social o ideológico. En este

...