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Construccion De Un Estado Liberal


Enviado por   •  3 de Abril de 2014  •  1.432 Palabras (6 Páginas)  •  161 Visitas

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Tema 4- LA CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO LIBERAL (1833-1868)

4.1 Las Regencias y el Problema Carlista (1833-1843)

Con la muerte de Fernando VII los absolutistas proclamaron rey a Calos María Isidro frente a los isabelinos. Iniciando así una guerra civil para ver si se acababa imponiendo el liberalismo o regresaba al absolutismo:

El carlismo es una ideología tradicionalista y antiliberal, a favor de la monarquía absoluta, de la Iglesia, del antiguo régimen y del sistema foral particularista. Los defensores del carlismo eran la mayoría del clero y de la nobleza agraria y una gran cantidad de campesinos, que desconfiaban en la reforma agraria propuesta por los liberales principalmente cobraron fuerza en la zona rural del País Vasco, Navarra, el norte de Cataluña y parte de Valencia y Aragón.

En el lado opuesto estaban los que apoyaban la causa isabelina, que eran la alta nobleza, los funcionaros y un sector de la jerarquía eclesiástica. Así pues la regenta vió la necesidad de unirse con los liberales acabando con el absolutismo y el antiguo régimen, con el fin de conseguir que burgueses y campesino le apoyasen.

Los carlistas carecían de ejército por lo que actuaban con el método de las guerrillas, más tarde recibió la ayuda de países como Rusia, Prusia y Austria. Mientras Isabel II contó con el apoyo de Gran Bretaña, Francia y Portugal.

En el conflicto armado se diferencian dos partes:

La primera etapa (1833-1835) en la zona norte, la guerra se estabilizó con la mayoría de victorias carlistas, pero sin llegar a conquistar ninguna ciudad importante. Carlos María Isidro se instaló en Navarra y con el general Zumalacárregui formó el primer ejército carlista hasta que al intentar tomar la cuidad de Bilbao muere, dejando al ejército carlista sin su mejor estratega. Mientras por el levante seguían muy desordenados sin conexión entre las partidas, el General Cabrera destaca como uno de los líderes carlistas.

En la segunda fase (1836-1840) se decantó del bando liberal, dirigidos por Espartero, que acabó con el fin del sitio de Bilbao, puesto que los carlistas se veían incapaces de frenar a los liberales, decidieron expandirse hacia Madrid, aunque nunca consiguieron conquistarla. Tras los triunfos de los isabelinos las posibilidades carlistas se redujeron y se dividieron entre transaccionistas partidarios de alcanzar acuerdos con los liberales dirigidos por el general Maroto quien firmó el Convenio de Vergara (1839) con el general Espartero y los intransigentes defensores de continuar con la guerra. Tras el convenio el cual establecía el mantenimiento de fueros de Navarra y País Vasco y la integración de Carlistas en el ejército real, solo las partidas de Cabrera resistieron en el Maestrazgo hasta 1840.

Regencia de María Cristina.

Cuando Fernando VII murió su hija solo tenía tres años por lo que su madre María Cristina actuó como regente. El primer gobierno estaba presidido por Francisco Cea Bermúdez representaba el liberalismo más moderado y conservador, impuso algunas reformas pero la más destacable es la división provincial.

Los liberales exigieron cambios más profundos y Martínez de la Rosa recién llegado del exilio fue elegido para presidir. Llevó a cabo las primeras reformas que aun que limitadas mostraron la voluntad de cambiar las estructuras del Antiguo Régimen. En 1834 se proclamó el Estatuto Real, que era un conjunto de reglas que para convocar a las cortes. Estas reformas, insuficientes, dividieron a los liberales en moderados y progresistas. La corona y los antiguos privilegiados se decantaron de parte de los primeros, pero la falta de poyos obligó a la monarquía a aceptar un gobierno progresista. Los progresistas tenían a su favor el movimiento popular, con la milicia Nacional y Las juntas Revolucionarias. Por lo que comenzaron a expandirse, a organizar revueltas y exigir reformas liberales. Ante esta situación María Cristina llamó formar gobierno a Mendizábal para realizar una reforma del Estatuto Real con el fin de adquirir recursos financieros y formar un ejército contra el Carlismo. Pero tras la desamortización de bienes del clero los privilegiados presionaron a María Cristina para que le destituyese. Se levantaron muchas revueltas a favor de restablecer la Constitución de 1812 y tuvo lugar el levantamiento de los sargentos de la guarnición de La Granja en el que ponía de manifiesto las tensiones entre moderados y progresista y que obligó a María Cristina a restablecer la Constitución de 1812 y dar el poder al progresista Calatrava.

En 1837 los progresistas intentaron implantar un sistema liberal, constitucional y de monarquía parlamentaria con actuaciones como la

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