Diferencias Entre Cuento Y Novela

LA DESCRIPCIÓN

La descripción es una representación de la realidad mediante palabras. Muestra y pretende hacer ver al lector una realidad concreta y hacer sentir una realidad abstracta. Se diferencia de la narración en que ésta cuenta sucesos que se desarrollan en el tiempo y, en cambio, al describir, lo descrito se inmoviliza y se sitúa fuera del flujo temporal, es por eso que se consideran, normalmente, estáticas. A continuación, se exponen las características de la descripción.

En primer lugar, los textos descriptivos suelen presentar una misma estructura que consta de dos partes: el tema o elemento descrito, y con él puede aparecer el marco y la expansión del tema donde se aportan cualidades, propiedades y nuevos aspectos del tema. La estructura y los elementos seleccionados dependen del objetivo del autor. En los textos científicos, se pretende informar, eso implica una selección precisa y objetiva. Por otro lado, en los textos literarios, se pretende conmover o incitar, es por eso que la selección será personal y subjetiva. Por último, en los textos publicitarios se pretende convencer, de ahí que la selección sea interesada.

En segundo lugar, la descripción pretende informar sobre el estado de las cosas, es decir, predomina la función representativa. Es por eso que casi nunca aparece como texto dominante o de forma pura sino que aparece como fragmentos subordinados en textos divulgativos o literarios, en los que se combina con partes narrativas o dialogadas. De ahí que existen dos tipos de descripciones:

Por una parte, hay las científicas-técnicas, en las cuales predomina lo expositivo o instructivo. Así, se caracterizan por el predominio del presente, la precisión en la información y la escasez de referencias directas al receptor. También utiliza oraciones simples y atributivas, adjetivos especificativos y sustantivos concretos, es decir, uso de un léxico denotativo monosémico y con inclusión de conectores espaciales, explicaciones o definiciones de términos nuevos.

Por otra parte, existen las descripciones literarias, en las que el autor prioriza la subjetividad, intentando despertar sentimientos del receptor, haciendo una descripción creíble. Dentro de la narración, el texto descriptivo se usa o bien para informar de la psicología de los personajes o bien para ornamentar el discurso y marcar cierto ritmo a la narración. Según su temática, existen dos variedades: las descripciones de personas (etopeya, retrato, prosopografía, caricatura, autorretrato) y las descripciones de paisajes (estáticas o dinámicas). Aún así, comparten unas mismas características como el uso de conectores espaciales, sustantivos abstractos, oraciones subordinadas y un lenguaje vivo y rico en figuras literarias. También se caracterizan por su lenguaje connotativo, la abundancia de enumeraciones polisindéticas

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