ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Dolores Veintimilla


Enviado por   •  21 de Noviembre de 2013  •  466 Palabras (2 Páginas)  •  2.296 Visitas

Página 1 de 2

Dolores Veintimilla de Galindo

"No hay barrera, cerradura ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente."

Virginia Woolf.

www.wikipedia.com

Nació en Quito en 1830, en medio de una familia acomodada de la capital. Sus padres fueron el señor Don José Veintimilla y la señora Doña Jerónima Carrión, ambos nacidos en Loja. A los dieciocho años de edad contrajo matrimonio con el médico colombiano Sixto Antonio Galindo, quien no supo comprenderla ni apoyarla en sus anhelos culturales. Las penurias económicas, el abandono de su marido y las críticas sociales, así como, su pensamiento adelantado a la época, marcarían la personalidad de Dolores, hundiéndola en una melancolía profunda y llevándola finalmente al suicidio en 1857.

Su vida y obra están cruzadas permanentemente por la sombra de la incomprensión y la intolerancia. Su espíritu rebelde y su hipersensibilidad la elevan a la categoría de heroína romántica y trágica, a la vez que la predisponen al sufrimiento y a la maledicencia de la sociedad, la pacatería de la ciudad, aislada y autosuficiente, hace que la gente pronto empiece a murmurar sobre el comportamiento de esta mujer, atractiva, buena lectora y de libre pensamiento.

Juan León Mera, escritor contemporáneo de Dolores, al evaluar la situación de la mujer de su época y las circunstancias que llevaron a la muerte de la poeta, escribe en su Ojeada Histórico-Crítica, "Acábese, por Dios, nuestra criminal indiferencia respecto de las mujeres; alentémoslas, saquémoslas a la luz para que fueron creadas, sentémoslas a nuestro lado y busquemos en ellas la mejora de nuestra propia condición."

Por otro lado, María cabrera menciona, “A mi parecer estuvo mal lo que ella hizo, ya que estaba muy joven aún, y ha sido la peor decisión "acabar con la vida", por la única razón de que su esposo la había abandonado y traicionado, y se dejó ganar por su orgullo, acabando con su vida, ya que no podía olvidarlo. La poeta nos deja un buen mensaje, no aferrarnos con el primer hombre que aparezca en nuestra vida, ya que la vida tiene un largo camino, lo cual puede desviarse, y llegando así, a nosotros grandes sorpresas.”

Es ilógico desconocer lo que tuvo que vivir esta quiteña bajo la presión machista e intolerable de la época por tan sólo expresar lo que sus sentimientos decían, pero es precisamente esto lo que la hace a Dolores Veintimilla una mujer digna de admiración que nunca se dio por vencida y que a través de sus poemas y escritos hechos con sentimientos que compaginan con las vivencias típicas de los demás han inmortalizado su memoria hasta nuestros días y seguirá haciéndolo por ser parte de la historia ecuatoriana.

Web

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (3 Kb)  
Leer 1 página más »
Disponible sólo en Clubensayos.com