Evolucion Historica De La Realidad Nacional

Evolución histórica de la Identidad Nacional Peruana

Los vestigios culturales más antiguos del Perú son los del hombre de Paccayccasa. Este humano es el llamado “Homo Sapiens”. Existió cierta igualdad en todo el mundo de acuerdo a este humano. Esto significa que el incanato es el súmmum de esos milenios de evolución. La más antigua construcción arquitectónica de América data del año 6000 AC en Cerro Paloma. También se encuentra el Templo de Cotosh en 2000 AC.

El período de las naciones independientes pre-incaycas comienza con la cultura Chavín (1200-300 AC). Las creencias de los pobladores giraban entorno al aspecto religioso. Este era un país de grandiosos agricultores y arquitectos que les permitió identificarse como una nación bien definida sobre su territorio.

En la cultura Paracas (750 AC-383 AC) tenían un conocimiento avanzado de la medicina. Su especialidad fue la trepanación in vivo. También destacaron en el ámbito de la industria textil y en la arquitectura.

Otra cultura de gran importancia fue la de Nazca. Fue un país de agricultores y mercaderes en el cual hubo intercambio comercial con Ayacucho. La capital de este fue famosa por las construcciones, por ejemplo un templo piramidal de 20 metros de alto. Sin embargo, lo que más se distingue es el calendario consistente en líneas, las cuales, también, se utilizaban para señalar los solsticios y equinoccios.

También es ineludible mencionar la cultura Tiahuanaco, luego la cultura Huari y finalmente la Chanca, que fueron estados organizados aún en mayores extensiones que las anteriores.

No se debe suprimir lo dicho por Dennis Saurat en su obra “LA ATLANTIDA”. En esta se basa en 2 hechos para corroborar sus afirmaciones:

1. El haberse encontrado esqueletos humanos en estratos terrestres cercanos a los fósiles de Toxodontes.

2. Las cabezas estilizadas de los pórticos de Tiahuanaco.

Se relaciona con estos tópicos, la misteriosa subsistencia de los Uros, quienes fueron los fundadores de la cultura universal y que su civilización se extinguió por los sismos y desastres naturales. Los cuales, como consecuencia, produjeron un languidecimiento y mutación física de la etnia americana. Y esta demostrado que la raza de los Uros ya no existe.

El pre-inkayco estaba ocupado por pequeñas naciones-estado, las cuales tenían las mismas costumbres y en cada una de ellas había identidad definida.

Con el invento de la agricultura, hace más de 5000 años AC se había logrado la Altura Cultura. Esta es el resultado de la evolución de los conocimientos de los contactos, relaciones y mezcla de varios grupos culturales. La Alta Cultura es una etapa superior que se caracteriza por adquirir la categoría de “Patrón Cultural” de todos los pueblos. Convirtiéndose en sello identificatorio común de estos.

Según el Dr. Luis E. Valcárcel, “solamente podemos hablar de Alta Cultura si demostramos que la infinidad de grupos, tenían una base común, rasgos que fueran comunes a todos”.

Estos rasgos comunes puede que sean reducidos. En lo económico tenemos de común ciertos alimentos considerados básicos, tales como el maíz, el arroz. Otro producto es la papa la cual está presente con gran realismo en el arte Mochica, lo que implica ya una relación de orden mágico que nos da a entender que la papa era antigua en el tiempo Mochica. Y en las representaciones de la cerámica de Nazca tenemos el maíz, la yuca y el camote.

Otro aspecto importante es que todos estos pueblos se han constituido a base de verdaderas unidades sociales. Estas son organizaciones intermedias entre la familia y la gran sociedad: tienen común la propiedad de su territorio, trabajan los campos de cultivo en ayuda mutua o trabajo colectivo. Tienen una organización política en que el anciano o mas experimentado es el jefe o “Curaca”. En el orden social todos los miembros del grupo estaban igualmente capacitados para realizar toda clase de funciones o trabajos. En el orden religioso tenían un dios común, la Huaca; eran las “pakcarinas”, lugar de origen del grupo de donde habían salido los progenitores o primeros padres. Cada una de estas comunidades era como un mundo en miniatura y juntos fueron la base para formaciones sociales más amplias, grupos tribales confederaciones de tribus, naciones y, por último, el Imperio. La Alta Cultura Peruana tiene así como nota característica de su unidad esta comunidad o forma social, que fue anterior al Imperio de los Inkas, se conservó y perfeccionó durante el Imperio.

En el Inkanato:

Se forjó el gran Estado inkayco, como una etapa superior de evolución (1000 DC-1532).

Logró afianzarse sobre los llamados 4 suyos y llegó a ser una nación con unidad de territorio, de religión, idioma y costumbres.

El inkanato se organizo sobre la base de los ayllus pre-inkaycos respetando el derecho de usufructo de estos sobre las tierras que ocupaban.

Luego, el elemento básico de la organización política, económica y social del inkario fue la tierra distribuida con justicia.

Se consideraba justo que los que conformaban la infraestructura estatal recibieran a cambio el producto de las tierras, mientras que ellos daban los servicios de su trabajo.

Lo más meritorio aún del incanato estriba en que tal tributo era pagado con trabajo y no al azar.

Después, se acudió a la Minka que era un tipo de trabajo en beneficio del Estado y la religión, pues se laboraba las tierras o rebaños del inka y del sol. La minka servía para sostener al soberano y su familia, al estado nobiliario y al mundo sacerdotal, al ejército y los funcionarios en general.

La Mita fue desempeñada únicamente por varones entre los 25 y 50 años. Servía para edificar construcciones para el beneficio popular. Luego, el poblador debía dedicarse al trabajo, ya que era considerado unos de los principales deberes cívicos y religiosos, pero no fue forzado sino que ellos encontraban un cierto nivel de alegría y placer al hacerlo.

Solo este concepto hizo posible la construcción de obras ciclópeas como Machu Picchu, Sacsayhuamán, que ni las maquinarias y técnica actuales podrían hacerse.

Antes los europeos usaban el sistema esclavista para poder edificar sus construcciones, mientras que los inkas lo hacían por placer, competencia o alegría. Aquí destacan los hatun runa quienes trabajaban con ahínco y alegría no porque alguien los obligaba,

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