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Influencia de la industria tabacalera (IT),

en contra del control del tabaco.

La secular tradición del cultivo, manufactura de productos y uso del tabaco en el Continente Americano sufrió una transformación cultural con el Descubrimiento y la Conquista. El proceso de colonización incorporó a las hojas de tabaco entre otros productos agrícolas americanos de gran rendimiento económico a los productos europeos. Su consumo se popularizó en Europa a partir del siglo XVII, y en el XIX ya dejaba enormes ganancias a los cosecheros, manufactureros y comerciantes e ingresos fiscales importantes a los gobiernos. Por eso, los soberanos españoles decidieron establecer el monopolio estatal del tabaco y aumentar un rubro más para sus jugosos ingresos. Cuando la Corona Española instauró en sus dominios el estanco del tabaco, dio a la industria tabaquera las condiciones similares de producción; de esta manera, los procesos de trabajo y las relaciones laborales en las fábricas peninsulares, cubanas y mexicanas fueron semejantes1 y, a partir de la segunda década del siglo XX la maquinización y automatización de la industria respondió a la lógica del desarrollo neoliberal y neocapitalista, sin importarle en lo más mínimo las catastróficas consecuencias para la salud y la vida de los seres humanos.

Objetivos de la IT

El objetivo primordial de la IT a partir de la industrialización del tabaco, ha sido vender la adicción y el síndrome de abstinencia a la nicotina y ha continuado haciendo lo posible por mantener su influencia para la expansión y transmisión de ese daño a la salud por medio de óptima organización comercial y mercadotecnia. Al imponerse la tasación a los productos tóxicos de tabaco, estos se convirtieron en artículos de publicidad, promoción y venta lícita. Consecuentemente, el Estado Mexicano, al privilegiar el “derecho a la libre empresa” de la IT, no solo apoya y defiende el poder dependógeno de sus productos, sino también, el riesgo de adquirir enfermedades graves y muerte prematura de las personas expuestas.

El objetivo general de la IT2 es evitar o retrasar la entrada en vigor de cualquier política pública de control del tabaco para que su impacto en la oferta, demanda y consumo sea el mínimo posible. Formalmente, utilizan herramientas legales que les permiten negociar con el Estado. Informalmente, usan su poder económico, capturando a los actores clave en el diseño y aplicación de la política. Las estrategias formales son: (1) promover programas para ser reconocidas como empresas socialmente responsables, (2) regionalizar la problemática de la regulación al tabaco al involucrar a los productores de hoja de tabaco, (3) maximizar los costos económicos y políticos de la regulación al tabaco por medio de amenazas a la estabilidad económica del país, (4) maximizar el riesgo ante el incremento de impuestos al abrir la posibilidad del contrabando,(5) difundir estudios científicos patrocinados por la misma IT cuyo objetivo sea deslegitimar la política de control del tabaco, (6) construir acuerdos mutuos o legislación conjunta para cambiar los instrumentos de control eficaz por otros que no funcionen. Las estrategias informales incluyen: (a) bloquear o retardar el proceso legislativo para que las iniciativas relevantes no sean dictaminadas o sean rechazadas, (b) aportar beneficios económicos personales como los regalos y viajes al extranjero, (c) otorgar beneficios económicos para el financiamiento de campañas políticas, (d) donar recursos a instituciones de caridad que se estima beneficiarían a actores clave y (e) contratar funcionarios de alto perfil en centros de investigación para colocarlos en conflicto de intereses que les impida promover adecuadamente el control de tabaco.

La IT se ha concentrado en cinco áreas de política anti-control de tabaco para instrumentar su influencia estratégica: • tasación, • libertad de comercialización y mercado, • espacios 100% libres de humo de tabaco, • advertencias sanitarias en las cajetillas de cigarrillos y • publicidad y patrocinio para fomento de la oferta, la demanda y el consumo de tabaco.

Con su influencia estratégica fiscal, la IT ha conseguido que los impuestos finales a los cigarrillos sean graduales y que se privilegien los impuestos nominales, lo que impide que el precio de los cigarrillos aumente e incida sobre la disminución de la demanda. La influencia estratégica sanitaria de la IT, con toda su fuerza financiera y política, influye en la sociedad mexicana y en las instituciones del Estado Mexicano para impedir que:

• prospere la prevención del uso de tabaco entre los jóvenes y los adultos jóvenes

• los estudiantes de primaria y secundaria se abstengan de fumar cigarrillos,

• los niños menores de 18 años se abstengan de probar su primer cigarrillo el año en curso.

• cada muerte prematura atribuible a la exposición a productos de tabaco se sustituya por dos nuevos fumadores menores de 25 años de edad,

• se libre a los niños más pequeños para iniciarse en la exposición a los productos de tabaco en virtud de la mayor la probabilidad de que se vuelvan adictos,

• los adolescentes que fuman vayan a seguir fumando hasta la edad adulta, incluso si tienen la intención de dejar de fumar dentro de unos años,

• disminuya la oferta, la demanda y el consumo de productos de tabaco en este país.

El poder dependógeno

Las estrategias empleadas por la IT incluyen su grande y persistente influencia para manipular la capacidad de administración de nicotina, y en consecuencia para imponer y aumentar el poder dependógeno de los productos de tabaco. Por eso, los países miembros de la OMS, como partes del Convenio Marco para el Control del Tabaco3 (CMCT-OMS), deberían adoptar ordenamientos normativos efectivos para reducir el poder dependógeno y el atractivo de los productos de tabaco industrializado.

En la medida en que la principal sustancia psicológicamente activa y supremamente adictiva del tabaco que es la nicotina, la OMS debería proporcionar a los Estados Miembros orientaciones sobre los fundamentos científicos y los posibles enfoques del marco normativo para anular la influencia de la industria tabacalera en la manipulación del poder dependógeno y del atractivo de los productos de tabaco.

Es urgente desplegar el ataque frontal para impedir la influencia que la IT ejerce sobre la oferta, demanda y consumo de productos industrializados de tabaco. Los daños que estos

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