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Quienes Conformaban La Sociedad Patriotica Y Quienes Estaban En La Firma De Acta De Independencia De Venezuela


Enviado por   •  1 de Enero de 2013  •  1.949 Palabras (8 Páginas)  •  4.955 Visitas

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El 05 de julio de 1811, el Supremo Congreso de las Provincias Unidas de Venezuela, reunido en Caracas desde el 02 de marzo anterior con diputados de las provincias de Caracas, Cumaná, Barinas, Margarita, Mérida, Trujillo y Barcelona, declaró la independencia absoluta de Venezuela. El cuadro La Firma del Acta de la Independencia, que había pintado Martín Tovar y Tovar alusivo a la declaración de Independencia el día 5 de julio de 1811.

En su designio, escoge el artista el momento en que reunido el primer Congreso de Venezuela, toda la asamblea se apresta a firmar al Acta de la Declaratoria de Independencia y Soberanía de la República. Constituyen la mesa los diputados Juan Antonio Rodríguez, presidente, y Luis Ignacio Méndez, vicepresidente. Francisco Isnardi atiende la firma en la mesa de la Secretaría donde se agrupan muchos diputados.

En el grupo principal del primer término, Francisco de Miranda se destaca como la figura más prominente de aquel concurso. Felipe Fermín Paúl e Ignacio Ramón Briceño esperan impacientes tomar puesto en la mesa donde a la sazón firman Francisco Javier Yánez y Martín Tovar Ponte.

Cerca de Lino de Clemente está José Ángel Álamo al parecer vertiendo frases de entusiasmo. Francisco Javier Ustáriz, cuya figura enlaza los grupos opuestos, invita a la firma al Marqués del Toro. Corresponden al primer grupo de la izquierda las figuras de Juan Germán Roscio, Juan José Maya e Isidoro Antonio López Méndez, comprometidos en una conferencia de interés. Así por el orden de la perspectiva, van diseñándose los grupos hasta contar en su totalidad las 53 figuras, inclusive parte del pueblo que por el fondo entran en son de amotinados.

Glorificación de Miranda

Para el cuadro La Firma del Acta de la Independencia, Tovar realizó un primer boceto en el año 1876 que fue titulado El constituyente de Venezuela (en masculino porque se refiere al Congreso). Su objetivo era contribuir a la glorificación de Francisco de Miranda y rendirle un homenaje a los 60 años de su muerte. Más adelante, para la Exposición Universal Internacional de París de 1880, el artista presenta un segundo boceto donde las figuras están más agrupadas. El mismo logró llamar la atención de Guzmán Blanco, quien solicitó a Tovar una réplica de gran tamaño, en formato de 560 x 375 cm, para ser colocada en el lugar en que ocurrieron los hechos, es decir en el salón de sesiones del Consejo Municipal de Caracas, antigua capilla del Seminario Santa Rosa de Lima. El éxito obtenido con esta pintura le valió nuevas encomiendas: por la suma de 400 mil bolívares asumió el compromiso de realizar las representaciones del Tratado de Coche así como las batallas de Carabobo, Boyacá, Junín y Ayacucho y las Alegorías de la paz y el progreso.

En la obra La Firma del Acta de la Independencia, cuyo formato definitivo mide 7x4,8m, se encuentra actualmente en el Salón Elíptico del Palacio Federal Legislativo, sede d la Asamblea Nacional. En ella figuran los 42 diputados que firmaron el Acta de Independencia. El personaje central es, desde luego, Miranda, con cuya concepción de su figura el artista logra generar un impacto, puesto que quedará para siempre representado en traje girondino francés y no de levita negra como lo pintó Juan Lovera.

Tovar aprovecha acertadamente la atmósfera de interior para envolver los colores, valiéndose de la distribución de la luz en favor del resalte de los personajes principales, mediante sobrios toques luminosos. En esta composición, las dimensiones resultan exageradas en proporción al tamaño real de la capilla, que mide menos de 7 metros de ancho. Es evidente que el pintor requería espacio amplio para ubicar aproximadamente 53 figuras humanas entre diputados y la barra que, por su actitud de exaltación, debió ser formada en su mayoría por fogosos miembros de la Sociedad Patriótica. Sobre la fidelidad de esta obra, el historiador Juan Ernesto Montenegro, en su libro La Capilla Santa Rosa de Lima (Ediciones de la Alcaldía del Municipio Libertador, 1990), explica: "El pintor no conoció a los hombres de la revolución y, como se hallaba en Francia cuando ejecutó la pintura, no conocía el recinto de la capilla.

Tovar y Tovar nació en el año 1828, por lo que cuando tuvo diez años de edad, momento en que la memoria suele tener condición perdurable, ya había fallecido buena parte de los tributos del Congreso Constituyente, pero también es cierto que en su niñez ha podido conocer a algunos sobrevivientes como Martín Tovar Ponte, Francisco Javier Yánez, Fernando Peñalver, Lino de Clemente, el obispo Manuel V. Maya, entre otros".

Francisco de Miranda, Simón Bolívar, Miguel Peña, Francisco Espejo formaron parte de lo que podemos considerar el primer partido político en nuestro país a finales del 1810 y principios de 1811. Tuvo como finalidad esencial lograr que el Congreso Nacional proclamase la Independencia. Este objetivo logró consolidarse como todos lo sabemos aquel glorioso 5 de Julio de 1811 como a las tres de la tarde en la ciudad capital. Llegó a contar en su propia estructura con más de 600 miembros nada más en Caracas, y tuvo sus filiales en Barcelona, Barinas, Valencia y Puerto Cabello Como se deduce, la Sociedad Patriótica tenía una estructura y una consistencia de partido. Al principio, se constituye guardando un criterio de selección. Así lo recomiendan las tácticas del momento. Luego amplía su base y acepta tanto blancos como mulatos, negros e indios, dando impulso inicial a nuestro desprejuiciado sentido de integración racial. La Sociedad Patriótica la integraban por esos días, entre otros: Francisco de Miranda, presidiéndola, Simón Bolívar, Miguel José Sanz, Simón Rodríguez, José Félix Ribas, Juan José Landaeta, Francisco Espejo. De allí surgen los símbolos patrios, el himno nacional y el primer proyecto de constitución del país. Allí se forman líderes y se escriben algunos de los discursos más influyentes que se dicen en las asambleas y circulan por el país. De allí surgen también la mayoría de los más

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