Resumen: Etapas De La Revolución Mexicana

Etapas de la Revolución Mexicana

A principios del siglo XX, el desarrollo Porfirista perdió impulso. Más de 90% de las familias rurales carecía de tierras, 80% de la población dependía de los bajos salarios agrícolas y en las regiones industriales las oportunidades de trabajo disminuyeron a causa del desplazamiento de mano de obra por la introducción de tecnología moderna.

Los problemas anteriormente mencionados se sumaron al proceder de un gobierno autoritario que no acataba el mando constitucional, modificándolo en su beneficio, y que sostenía a gobernadores en estados como San Luis Potosí, Michoacán, Tlaxcala, Coahuila y Yucatán, donde el pueblo se mostraba inconforme ante las irregularidades manifestadas.

Su inconformidad se mostraba a través de huelgas y rebeliones, pero la represión sufrida por la población en las manifestaciones contra el gobierno contribuyó a la agudización de la crisis económica y social. Estos sucesos en los albores del siglo XX, quitaría del poder al presidente Porfirio Díaz y daría grandes batallas sin miedo a la muerte, en busca de mejores condiciones para el pueblo.

Niveles de Pensamiento Anarquista y Anarco-sindicalista

Se pueden ubicar en tres niveles. Por una parte, están los pensadores europeos , teóricos, entre quienes se puede mencionar a Proudhon, Bakunin y Kropotkin. En un segundo nivel, se ubican los inmigrantes europeos y latinoamericanos como Rhodakanaty, Ferrés, Muñúzuri, Moncaleano y otros, quienes llegaron a México a finales del siglo XIX y entre principios del XX. En un tercer grupo, están los organizadores mexicanos, Francisco Zalacosta, Santiago Villanueva y Rafael Pérez Taylo, entre muchos otros, particularmente artesanos y obreros.

Los inmigrantes europeos, en su mayoría, no pretendían el uso de la violencia.

El argumento para convertirse en propietarios de las fabricas era que todo lo que las conformaba había sido hecho por obreros o campesinos, que los trabajadores eran los que daban valor a cualquier bien, y que los capitalistas se quedaban con el valor del trabajo de la población, acumulándola en capital o en forma de bienes de capital que dilapidaban en un estilo de vida suntuoso.

Las ideas anarquistas fueron bienvenidas entre los artesanos. Al hacer suyas las ideas anarquistas, reaccionaron en defensa propia, abrazando el ideal político que los protegía de un gobierno cada vez más poderoso, hostil e influido por la doctrina capitalista, ya fuera conservador o liberal, porque este ideario político se contraponía a cualquier poder por encima de la individualidad y de las decisiones colectivas. Los anarquistas proclamaban una sociedad igualitaria, en la cual no existiera ningún gobierno general, sino sólo la suma de colectividades de trabajadores

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