ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

SATURNINO CEDILLO Y LA GUERRA CRISTERA


Enviado por   •  21 de Mayo de 2013  •  431 Palabras (2 Páginas)  •  451 Visitas

Página 1 de 2

Saturnino Cedillo y la guerra cristera

________________________________________

El gobierno de Abel Cano estuvo delimitado por la fuerza militar y política de Saturnino Cedillo, por la aplicación en la entidad de la política anticlerical del presidente Calles y por la reacción a la misma de los católicos potosinos.

Abel Cano logró acceder al gobierno gracias al apoyo de Cedillo, quien tendría un papel estratégico para el presidente Calles en los años siguientes. Cano había recorrido gran parte del país vendiendo hierbas medicinales y aplicando recetas naturistas, por eso se le conocía como "el doctor". Era originario de Coahuila y tuvo que enfrentar una situación compleja al ejercer su gobierno: aplicar una política anticlerical dictada por el poder central en una entidad eminentemente católica y ante una Iglesia fortalecida por la dirección de un obispo popular, Miguel de la Mora.

Desde 1925, cuando el presidente Calles impulsó la creación de la Iglesia Católica Apostólica Mexicana, independiente de Roma y apoyada en el líder obrero Luis N. Morones, se desató un conflicto que, particularmente en las zonas rurales del país, llevaría a una guerra civil conocida como la Cristiada. Grupos católicos de la ciudad de México formaron la Liga Nacional para la Defensa de la Libertad Religiosa (LNDR), y otras ligas fueron organizadas en más ciudades del país. El obispo de San Luis alentó la formación de la Liga Católica Popular Potosina. Estas organizaciones católicas eran principalmente urbanas, compuestas por sectores medios y con una participación muy activa de las mujeres.

La política anticlerical se agudizó a partir de los primeros meses de 1926, cuando el gobierno de Calles ordenó reglamentar los artículos de la Constitución que afectaban la posición de la Iglesia católica. El gobierno de Abel Cano procedió en el mes de febrero de 1926 a la clausura del Colegio del Sagrado Corazón, por estar dirigido por religiosas y no impartir instrucción laica. El Sagrado Corazón era una institución para mujeres que tenía un internado al que asistían hijas de familias de clase media y alta provenientes de varias ciudades del país. En marzo se definió el número de sacerdotes que se permitía por cada municipio del estado. Al municipio de la capital, con 100 000 habitantes y 17 templos, le correspondieron dos, al de Matehuala, Rioverde y Santa María del Río, dos a cada uno, a todos los demás, uno por cada municipio. Los sacerdotes tenían que registrarse ante las autoridades. El obispo Miguel de la Mora, en el primer momento, buscó un acercamiento con el gobierno de Abel Cano, a sabiendas de que éste se veía forzado a aplicar medidas dictadas desde el poder central

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (2.7 Kb)  
Leer 1 página más »
Disponible sólo en Clubensayos.com