SOBERANÍA PERDIDA EN COLOMBIA

SOBERANÍA PERDIDA EN COLOMBIA

Soberanía es definida por la real academia española como la máxima autoridad dentro de un esquema político; está asociado al hecho de ejercer control sobre determinado territorio y recae en el pueblo.

A lo largo de la historia Colombia ha tenido grandes pérdidas de territorio, como la de hoy... “perdida de parte del mar concedida a Nicaragua.” A continuación se observa un pequeño recuento y análisis de las diferentes perdidas de territorio que ha tenido que afrontar Colombia ya sea por no pelear por lo que nos corresponde o porque hay una mala administración al frente del poder.

Perdimos a Panamá en 1903; hemos perdido más de medio millón de kilómetros de nuestra selva amazónica con Brasil, Ecuador y Perú; perdimos en 1952 el archipiélago de Los Monjes con Venezuela, gobierno ante el cual, en el pasado, también perdimos cerca del 50 por ciento de lo que en otra fueran nuestros llanos orientales y para completar este breve recuento, en el 2012 dejamos sin mar territorial a un Departamento entero, donde sus habitantes raizales, en su gran mayoría pescadores artesanales, quedaron inmersos en un limbo jurídico que no entienden pero que pese a ello, saben que pone en riesgo la subsistencia y supervivencia de sus familias.

La primera perdida de territorio fue con Venezuela. En 1830 cuando la Gran Colombia se separaba, un señor Michelena, venezolano, negoció con el Canciller Colombiano Pombo, y acordaron ceder el 50 por ciento de los llanos en Vichada y Guainía, además se dividió la Guajira en dos. Venezuela quería toda la Guajira.

En 1901 hubo un enfrentamiento en la Guajira entre Colombia y Venezuela que dejaría 600 muertos, a lo largo de todo este tiempo, la Guajira Colombiana se hacía más pequeña. Luego en 1917 intervinieron los Suizos y dividieron todo mediante un acuerdo, y Colombia perdió el 60 por ciento de lo que era la Guajira.

El caso de LOS MONJES, cinco islotes localizados en la alta mar del Océano Atlántico, a 18 millas marinas de la Guajira colombiana. Se trata de unos promontorios rocosos, inhabitables y desprovistos de vegetación que parte del año están cubiertos por el agua.

En 1952, sin embargo, se planteó el interrogante de si estos islotes pertenecían a uno u otro país. El Canciller colombiano Juan Uribe Holguín, apartándose del criterio de eminentes colombianos que fueron oportunamente consultados por el gobierno de entonces, envió al respecto una nota en la que Colombia manifiesta carecer de la soberanía sobre los Monjes. Dice así la nota:

“El gobierno de Colombia declara que no objeta la soberanía de los Estados Unidos de Venezuela sobre el archipiélago de los Monjes y que, en consecuencia, no se opone ni tiene reclamación alguna que formular al ejercicio de la misma o a cualquier acto de dominio por parte de este país sobre el archipiélago en referencia”.

Vale mucho más la cordialidad con Venezuela, cedamos nuestros derechos y demostrémosle al pueblo que apreciamos mucho más su amistad que la posesión de pedazos de tierra o roca. Sí señores, se los cedimos.

Perdida de territorio con Perú, nos remontamos a 1829, cuando el presidente del Perú el General Lamar, apoyado por las fuerzas rebeldes de José María Obando y José Hilario López decidieron invadir Colombia con el fin de apoderarse del Ecuador, Pasto y Popayán, pero no pudieron, en tres días los derroto el Mariscal Ayacucho.

La segunda invasión de los Peruanos se daría en 1911, Cuando Colombia montaría un puesto de Aduana en un sitio llamado "La pedrera" y a los Peruanos les molestó, sin razón, porque este territorio era de Colombia, y entonces enviaron una carta directa a la cancillería Colombiana y de una un ataque qué acabó con la pequeña guarnición Colombiana, y Perú tomó posesión de dicha zona. Frente a la pobre respuesta del Gobierno Colombiano, Perú aprovechó y tomó más territorio como el margen derecho de lo que hoy es Caquetá, Colombia seguía pasiva, sin defender la vida de nada ni nadie. En 1922 se firmó un tratado de Límites, pero en 1932 a los Peruanos no les importo y volvieron a invadir territorio nacional, ésta vez amenazando Leticia y todo el trapecio

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