ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Serpiente de pluma rica


Enviado por   •  25 de Agosto de 2012  •  2.516 Palabras (11 Páginas)  •  931 Visitas

Página 1 de 11

I

Quetzalcóatl

“Serpiente de pluma rica”

La serpiente fue uno de los animales con mayor presencia en la historia y mitología de las sociedades mesoamericanas, prácticamente en todos los periodos y en todas las culturas aparecen representaciones de este animal al que en esencia se le asociaba con el ámbito terrestre y con aspectos como el inframundo y la renovación de la vegetación. A partir de esas atribuciones compartidas, la serpiente, fue adquiriendo paulatinamente rasgos y significados diversos, tomados de otras criaturas. Se le consideraba el ser que conducía a los humanos por diferentes sitios del cosmos y como ordenador del tiempo y el calendario; estaba relacionado con la tierra y sus frutos, los orígenes y los destinos, la legitimidad y el poder, la luz y los colores.

La serpiente emplumada es el mas complejo de los seres míticos delas culturas que se desarrollaron durante la época precolombina producto de una suma de cualidades, en que se mezclan una criatura del cielo (el ave) y una criatura de la tierra (la serpiente). Desde su aparición en el arte publico teotihuacano de principios del clásico (200 – 700 D. C.), fue un ser en el que se unieron los dominios celeste y terrestre. A fines de ese periodo la serpiente adquirió rasgos humanos, al grado de que gobernantes distinguidos llevaban su nombre, en el complejo mundo del posclásico (900 – 1521), Quetzalcóatl (de quetzal o quetzalli, “pluma rica”, y coátl, “serpiente”: “Serpiente de pluma rica”) era un ser con el que se relacionaban personajes históricos, protagonistas de mitos de creación, patrono del gobierno y deidad con diversas abdicaciones, entre las que, las más significativas eran las de: dios viento, Ehécatl, y la de estrella matutina y vespertina, Tlahuizcalpantecuntli o el planeta venus.

El aspecto agrícola de la serpiente emplumada parece ser él más antiguo y también él más permanente en la ideología tradicional de los pueblos campesinos actuales, los cuales creen en la existencia de un monstruo en forma de serpiente emplumada que vive en la profundidad de las cuevas y barrancas cercanas a sus poblados. Este temible ser es también quien procura los mantenimientos y tiene un aspecto celeste. Pues cuando surca el cielo viaja sobre las nubes generadoras de las lluvias para la germinación de las plantas comestibles.

En la serpiente emplumada se sintetizan las materias frías extraídas del mundo subterráneo y las sustancias luminosas para el crecimiento de la vegetación.

Quetzalcóatl es el dios capaz de arrancar las ocultas riquezas del mundo subterráneo, oscuro, egoísta. Principalmente el maíz, sustento esencial de los humanos. Para lograrlo contó con la ayuda de sus aliados las hormigas, habitantes del inframundo, que le indicaron el lugar donde se encontraba el preciado alimento.

La serpiente emplumada se relaciona con el ciclo de crecimiento del maíz, cuyas hojas verdes se comparan con las plumas de quetzal; las mazorcas se confunden con las escamas de su cuerpo. Durante la época de lluvias, los campos de cultivo con las plantas de maíz erguido y sus hojas verdes en movimiento se expresan mediante la metáfora visual de la serpiente emplumada como un inmenso monstruo omnipresente que cubre la extensión de los terrenos.

Cuentan los mixtecos que su plumaje brillaba cuando lo tocaban los rayos del sol, pues Quetzalcóatl es también quien trajo a la tierra luz y los distintos colores que se manifiestan en el maíz, en las aves de pluma rica, en las piedras preciosas, en los árboles y en las distintas direcciones del mundo de los vivos. Como dueño de los reflejos iridiscentes, la serpiente esta directamente relacionada con el rayo y el fuego, creadora de la vida.

La mediación de Quetzalcóatl en el origen y crecimiento de la vegetación, fuente primordial de sustento de los antiguos mesoamericanos, debió ser el fundamento para asignarle a este dios muchos otros atributos relacionados con la energía esencial para la vida de los humanos y el equilibrio necesario para su preservación.

II

Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl.

Mixcóatl quien había guiado a un grupo proveniente, de un lugar misterioso que llamaban Huehuetlapallan. Hasta un sitio ubicado en el sur de la cuenca de México. Fue asesinado por sus enemigos al poco tiempo.

Su hijo llamado topiltzin se dispuso a recuperar el mando; se preparo para la lucha y cuando había cumplido treinta años venció a los adversarios de su padre, Topiltzin había nacido en el día ce acatl y por otro nombre se adjudico el de la serpiente emplumada: Quetzalcóatl.

Así entonces, se llamo: Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl.

Ce Acatl Topiltzin Quetzalcóatl, pensó que Culhuacan no era el sitio indicado para su gente, y la llevo a vivir a un solitario valle al que bautizo como Tollantzinco. En silencio el ahora nuevo monarca levantó su huapalcalli (casa de madera), a donde se retiro a orar y ayunar. Al término de cuatro años los vecinos de la región fue a buscarlo querían que Topiltzin fuera su jefe y sacerdote. Y así se hizo. El que vino al mundo un día ce acatl se dirigió a tollan, donde gobernó diecinueve años. El hombre se había transformado en dios, ahora el dios debía transformarse en hombre que para eso iban a buscarlo los de tollan.

Ese pueblo que carecía de gentilicio decidió que se llamarían toltecas que quiere decir: “artista, escultores”; entonces Topiltzin impulso a los artesanos a que hicieran grandes obras de arquitectura, a que levantaran templos y palacios, les dijo como debían tallar la piedra, como hacer de una roca las esculturas que adornarían sus casas, como hacer palacios de turquesa y de plumas de quetzal, la manera de construir hermosos recintos para el juego de pelota, todo esto y muchos otros conocimientos muy buenos les enseño a su pueblo logrando un reino admirable, respetable y prospero que duro poco tiempo, por las acciones de sus enemigos; topiltzin quería imponer en tollan el culto a Quetzalcóatl, sus enemigos buscaban la gloria del dios Tezcatlipoca, el señor de la noche, el que exigía sacrificios humanos. Topiltzin no sacrificaba mas que culebras, pájaros y mariposas y las ofrendaba con ramas de laurel

Entonces cuentan que Tezcatlipoca se enojo, y le mostró a Quetzalcóatl para que conociera su verdadero rostro que estaba hinchado y deforme. Entonces le dieron a beber pulque para que se emborrachara

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (15.1 Kb)  
Leer 10 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com