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Sociedad Feudal


Enviado por   •  27 de Mayo de 2014  •  2.298 Palabras (10 Páginas)  •  451 Visitas

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La sociedad feudal

El Feudalismo es una forma de organización política basada en la regulación de relaciones personales a través de instrumentos contractuales. Un hombre libre se encomienda a la protección de otro, comprometiendo para con él su lealtad y su servicio, y recibiendo de éste un beneficio, ya fuese un cargo, ya un territorio, al que posteriormente se conocerá de manera generalizada como feudo. El protector se convierte así en señor del protegido, que recibe el nombre de vasallo.

En esta sociedad, como modo de producción en occidente, se caracterizó por ser la tierra el principal elemento que determina la existencialidad social del conjunto humano que lo vive; en efecto, quien tiene la propiedad y posesión de la tierra (legitimado en su posesión por parte de la nobleza) a su vez es propietario, también, de quienes la habitan sin ser propietarios.

Fue un sistema político, social y económico que se desarrolló en gran parte de Europa Occidental desde fines del siglo IX hasta fines del siglo XII. Este sistema tuvo sus orígenes en el colonato romano y se perfeccionó entre los francos, a la muerte de Carlomagno, cuando el reino se dividió y el poder real fue reemplazado por el de los señores feudales.

No había clases sociales sino estamentos; es decir que no había movilidad social y el que nacía pobre moría pobre. Existían tres estamentos: los caballeros (los que luchaban), los sacerdotes (los que rezaban) y los campesinos (los que trabajaban). Los campesinos eran el sostén económico de los sacerdotes y los caballeros. Se suponía que este orden era divino, que Dios lo había dispuesto así; por lo tanto, de acuerdo a la concepción de la época, quien se oponía a este orden, se oponía a Dios.

Los señores feudales Vivian en castillos que construían en lo alto de las montañas para poder vigilar la zona, controlar los trabajos de los campesinos y los posibles ataques de los enemigos. Casi todos tenían una muralla exterior defensiva y otra interior. Entre las dos murallas había un patio que servía de refugio en caso de ataque.

Las tierras de los señores feudales estaban divididas en:

Tierras Señoriales: tierras explotadas por el Señor Feudal que eran trabajadas por sus siervos durante tres días a la semana como pago a la protección que él les daba. Los siervos vivían en caseríos o aldeas que estaban en las tierras del Señor.

Tierras Censuales: tierras que el Señor prestaba a los campesinos a cambio de tributos y protección.

Tierras Comunales: eran los bosques y pastos que explotaban en conjunto el Señor y los habitantes de las aldeas.

Dominio Útil: Útil se llamó en Roma al derecho adquirido sobre una cosa sin ser el dueño. En la Edad Media, la propiedad de Dominio Útil era la propiedad usada por el Vasallo que estaba sujeta a cargos feudales.

Dominio Inminente o Dominio Directo: Era el verdadero dueño de la cosa y era el que conservaba el señor feudal sobre sus tierras. El Rey como supremo señor feudal del reino, tenía un dominio directo sobre las propiedades del Reino. Para la Revolución Francesa esas cargas feudales fueron abolidas, quedando este dominio directo o inminente solo al Rey lo cual heredó el Estado Moderno.

Los señores feudales usaban el vasallaje que era un contrato que se establecía entre el señor y sus subordinados donde se establecían obligaciones mutuas. Por lo general el señor se comprometía a velar por la vida de sus vasallos y éstos a obedecerle y proveerlo de alimentos y servicios personales, que incluían acompañarlo en la guerra.

Dentro de las clases sociales tenemos a los siervos, los campesinos, la burguesía, la nobleza y el Rey, aparte de los Gremios.

Campesino era llamado al todo aquél que trabajara la tierra con sus manos fuera propia o ajena sin distinguir a los que pagaban tributos de los que no. Este podía trabajar la tierra libremente o trabajar para un Señor Feudal. No tenían derechos ni libertades y en muchas ocasiones estaban sujetos a los abusos del Señor.

La Burguesía era la población perteneciente a una comunidad urbana independiente conocida como Burgo o ciudad. Ocupaban puestos altos en el gobierno y cargos administrativos. En ellas vivían obreros libres, artesanos, comerciantes y tratantes.

La Nobleza por su parte, la constituía el Rey, los señores feudales y sus Vasallos.

Al crearse las ciudades los habitantes se agrupan según su profesión a los que llaman Gremios. Gremio es la unión de profesionales autónomos con su propio reglamento y jerarquía. Dentro de estos gremios, encontramos a los “aprendices”, “compañeros” o “ayudantes” y a los “maestros”. Nadie podía trabajar o practicar algún oficio sin pertenecer a un Gremio. Estos Gremios nacen como una necesidad común para trabajar y luego se convierten en grandes oligarquías de familias influyentes que elegían los cargos municipales y las delegaciones de los Parlamentos. Esto se abolió con la llegada de la Revolución Francesa al prohibirse la asociación entre individuos de un mismo oficio.

El Aprendiz era el que tenía el grado inicial en la profesión por aprender. Necesitaba de un contrato escrito con formalidades y otorgado ante notario público firmado por el maestro o patrón y por el aprendiz o en su defecto, si era menor de edad, por los tutores de este. Este contrato regulaba y protegía al aprendiz de posibles abusos del dueño del taller y disponía que el maestro se obligaba a enseñarle al aprendiz el oficio sin guardarse para sí ningún secreto profesional. Podía castigarlo por ineptitud o vagancia pero dentro del orden moral porque si se excedía en el castigo era penado fuertemente. En este contrato se estipulaba el término del aprendizaje que era de siete años para cada oficio. El Aprendiz no recibía pago alguno por su aprendizaje, ya que se consideraban las lecciones como pago además de vivir y comer en la casa del maestro donde era recibido como parte de la familia.

Los Compañeros o Ayudantes eran los que al terminar el aprendizaje se convertían oficialmente en ayudantes del maestro. Debía jurar ante éste y sobre los Evangelios que trabajaría con honradez y capacidad, denunciando cualquier violación que cometiera o que viera cometer en otros. Firmaba un contrato con su maestro o con otro por tiempo indefinido o por obra hecha. Si por alguna razón no encontraba trabajo podía asistir a una plaza a ofrecer sus servicios y para ello debía mostrar su certificado de aprendizaje. Podía abandonar su trabajo con justa justificación y con quince días de anticipación.

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