ALGÚN DÍA SE BORRARÁ

Ensayo “Sociedad de los Poetas Muertos”

“La Sociedad de los Poetas Muertos” muestra el despertar adolescente por el gusto hacia la poesía, lo romántico, la búsqueda de la identidad y la orientación vocacional, además de servir como herramienta motivadora para cualquier adolescente mostrando también los períodos rígidos a los que eran sometidos los alumnos años atrás.

En esta historia se narra el encuentro de un grupo de alumnos y su nuevo profesor, durante 1959 en la Academia Welton, que los intriga en su forma de pensar. Los alumnos son convencidos de hacer una búsqueda personal, encontrarse a sí mismos, hacerse cuestionar de todo para permitirse su propia felicidad, además de no limitarse a nada hasta lograr sus objetivos y no ser controlados por la autoridad que los maneja.

En esta película se pone en escena la gran capacidad del poder transformar al ser humano empezando por cada clase el profesor, Sr. Keating, los hace comprender el mensaje de “aprovechar el día”: «Carpe Diem». Frases como esa o como “sólo al soñar obtendremos libertad” son las que rompen los esquemas del pensamiento formal y exigente que tenía la Academia Welton para mostrarse tal y como son. Los pensamientos de vivir, amar y, sobre todo, aprender a hacerlo sin dejar de ser ellos mismos.

Al mismo tiempo, cuestiona a los padres de familia, que quizás buscando lo mejor para sus hijos no piensan en lo que ellos sienten, necesitan o quieren en realidad, traspasando y limitando una parte muy importante del educar: la persona.

Gracias a grandes citas como las anteriores, el mensaje que tiene, las reflexiones que incluye y todo su contenido inspiracional, esta película ganó un Premio de la Academia u Oscar en 1989 como “Mejor Guión Original”.

Uno de los principales dilemas de la Academia Welton es que se preocupa más por proporcionar información y conocimientos a los estudiantes y no por su formación como personas. Se basa en conceptualizar lo que enseña, olvidando que ellos tienen derecho a expresarse o pensar diferente, esto es lo que dicha institución no quiere aceptar e, incluso, llegan a corregirlos físicamente. El error que muchos cometemos es ocultar por miedo o vergüenza nuestros sentimientos, pensamientos grandes y deseos que nos llenan como personas para no ser juzgados ante el resto, ante la sociedad.

El profesor, Sr. Keating, intenta romper los esquemas de enseñanza que proporcionarían un mejor desempeño en los estudiantes. La Academia Welton encuentra similitudes con nuestros actuales centros educativos al promocionar ambientes de disciplina, exigencia y rigidez, dejando por fuera la libertad de expresión, formando prácticamente robots y no personas. Tal caso se evidencia en el hecho de que casi no se fomenta en los colegios el arte en sí, como la música,

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