Antecedentes Históricos Y Definición De La Familia

I. Cambios básicos en la familia mexicana como consecuencia de la conquista

“Los antecedentes históricos de un pueblo, determinan una modalidad caracterológica que se refleja en la formación familiar, basada en la pareja”. Esta frase me hizo reflexionar en la importancia de conocer la evolución desde antes de la conquista hasta ahora, pues la influencia de los españoles sobre las parejas mexicanas fue muy fuerte y de ahí podemos entender muchas cosas de nuestra cultura actual.

La conquista determina un nuevo modelo de familia al destruir, necesariamente, el ya existente. Nunca hubo incorporación mutua entre el español y la mujer azteca, la trataba como un objeto sin calidad humana. Esto generó muchos conflictos dentro de los roles familiares. Había mucha contraposición con los roles que el matrimonio “normal “demanda (fidelidad, apoyo, aceptación). No existía comunicación dual y adecuada entre madre e hija, ni tampoco la relación con un padre protector, cariñoso y presente. Las mujeres se sentían objetos. Para los hombres también fue difícil esta relación ya que no satisfacían a la mujer pues nunca aprendieron a ser buenos proveedores maternos. Todo se rebajaba a ser un objeto el uno para el otro y como una cierta autodefensa por parte de la mujer hacia el conquistador. Por otro lado el hombre mexicano tampoco tuvo un buen modelo de padre, el conquistador “arrasaba” no había ternura, apoyo, protección. A raíz de la conquista es evidente que en nuestro país la figura del padre de familia ha estado ausente. Es por esto que el mexicano al escoger pareja, busca a alguien diferente a la madre para revaluarla y desligarse de una dependencia demasiado fuerte al ser la única figura cercana.

Frente al matrimonio en el mexicano, significa entregarlo todo, la expectativa es muy alta por ambas partes y se espera TODO del uno como del otro. Por lo tanto las desiluciones son grandes. Las parejas mexicanas son reticentes en su entrega por resentimiento y temor. Por eso hay humillaciones y desconfianzas.

Con la conquista la mujer y el hombre pierden sus posiciones. Son separados brutalmente como pareja y son convertidos en esclavos perdiendo estructura y calidad humana.

El mexicano, en el fondo de su ser no sabe quien es, que es, que quiere y a donde va. Todo lo que anhela es el poder para sentirse alguien y estar a la altura de aquel que lo humilló y abandonó.

Al cambiar la organización social la mujer pierde totalmente todo, solo conserva una posesión: su hijo. Se siente protectora. Se dice que de aquí nacen las famosas “nanas mexicanas”.

La familia mexicana actual es el resultado de la mezcla entre dos culturas que básicamente tenían organizaciones semejantes en cuanto a tradición y costumbres, sin embargo a partir de la conquista, toda la organización social azteca, por lo tanto también la familia.

En México

...