PROBLEMAS DE IDENTIDAD EN LA JUVENTUD QUE TIENEN REPERCUCIÓN EN EL RENDIMIENTO ESCOLAR

” PROBLEMAS DE IDENTIDAD EN LA JUVENTUD QUE TIENEN REPERCUCIÓN EN EL RENDIMIENTO ESCOLAR”

RESUMEN

Este trabajo hace referencia a la problemática que padecen los jóvenes debido a los cambios que éstos presentan y que son propios de la juventud, ya que es una etapa crítica en la que requieren de un intenso apoyo por parte de su familia y amigos; a los problemas de personalidad y baja autoestima que sufren con regular frecuencia, al rechazo tanto escolar que los estudiantes tienen contra la institución educativa, como el que ellos mismos soportan por parte de sus compañeros al no ser aceptados por las diferencias socioculturales y de tribus urbanas que han tomado un auge impresionante hoy día; así como la desintegración familiar que también cada día se ve con más regularidad.

Es bien sabido que en la actualidad la integración familiar se ha visto muy deteriorada por la violencia intrafamiliar, el incremento de divorcios, donde las familias monoparentales han aumentado y aunado a que estas familias, generalmente integradas por la madre y los hijos, además de sufrir la falta de la figura del padre, sufren carencias económicas y de apoyo emocional ya que la madre se ve obligada a salir a trabajar y por consecuencia no tiene un contacto continuo y estrecho con sus hijos, lo que provoca una fractura en la relación entre las dos partes, condicionando que el joven se vuelva rebelde, depresible, solitario, ensimismado en sus pensamientos y sentimientos, generándole problemas de identidad personal.

DESARROLLO

Este trabajo ampara un problema real de lo que los estudiantes del Instituto Tecnológico de Lázaro Cárdenas, están viviendo actualmente, a raíz de las diversas problemáticas que presentan cada unos de ellos mismo que se ven reflejados en el rendimiento académico bajo con el cual se están desarrollando.

Considero que el problema se generó porque los alumnos presentan problemas de baja autoestima, rechazo escolar y desintegración familiar y que éstas condiciones los han hecho tomar decisiones como llegar hasta el intento de suicidio.

La baja autoestima se muestra como un fuerte predictor de trastornos de la personalidad y de síntomas patológicos; considero que es muy cierto que cuando el joven ve acechada su estima es muy probable que desarrolle conductas patológicas de su personalidad, hay que tener en cuenta que ésta en proceso de desarrollo y que dependiendo de las posibilidades que le brinde su entorno familiar y escolar se puede favorecer esta situación o no; pero también es cierto que en algunas ocasiones el joven a pesar de su entorno interno y externo desfavorables es capaz de salir avante de esas situaciones conflictivas, dándose la oportunidad de ser benevolente consigo mismo y con los que le rodean, es cierto, son pocos, pero los hay.

Para el joven es importante que el adulto reconozca sus ideas y creaciones, le haga ver y sentir que son valiosas.

Por las muestras de falta de aprecio que el joven ha vivido y que le condiciona una total desconfianza en si mismo; la conducta desorganizada, inquieta e impulsiva del joven le provoca un impacto negativo que incide en su autoestima y lo lleva a tener un pobre desempeño académico y un alto índice de reprobación; algunos padres menosprecian los esfuerzos de sus hijos haciendo comparaciones entre los miembros de la familia, no se le da valía a los trabajos que ellos realizan y algunos profesores se dan a la tarea de reafirmar los errores y pasan por alto los aciertos de los estudiantes, aunado a esto, la sociedad que exige perfección; todos estos factores generan en el joven sentimientos de inseguridad y frustración dando como resultado una baja autoestima, inadaptación escolar, una conducta antisocial, y retraimiento.

El proceso de socialización escolar existe una clasificación cuatripartita del estudiante que comprende actitudes como: adhesión, acomodación, disociación y resistencia, en la que, en la adhesión se encuentran los alumnos proescuela, en la acomodación los estudiantes que acuden a la escuela como un medio de escapar a su condición, en la disociación se encuentra la negativa individual y en la resistencia, la negativa colectiva ambas de aceptar las exigencias de la escuela.

Existen los estudiantes que les gusta ir a la escuela y obviamente con un aprovechamiento escolar muy destacado, son alumnos que emocionalmente se encuentran estables, viven una vida plena llena de satisfacciones personales y familiares y que muy posiblemente cuentan con un proyecto de vida bien definido; existen también los estudiantes que van a la escuela a estudiar para lograr una profesión que les permita tener un futuro mejor que el que sus padres les han proporcionado; pero es más el número de alumnos disociados y resistentes que muestran un rechazo marcado a la escuela en los que la negativa individual hace eco en el resto de la población estudiantil, tornándose en una negativa colectiva que incide en el rendimiento escolar, provocando índices de rezago y reprobación muy elevados, lo que los lleva a veces a no terminar con su enseñanza superior.

Uno de los factores que contribuyen al rechazo escolar en los estudiantes, es la alteración de la dinámica familiar, obviamente esta alteración puede provocar la aparición de conductas violentas de rechazo a sus padres, a sus profesores y a las instituciones educativas, como menciona en su artículo “Familia y violencia escolar: el rol mediador de la autoestima y la actitud hacia la autoridad institucional” donde refiere que las relaciones familiares son

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