Caso Clinico Enfermeria Psicosocial

Como enfermero de zona trabajo en una posta rural en Alto Bío Bío. Durante la entrega de leche para una madre con un hijo de 7 meses, en ese proceso ella refiere ‘tener un gran problema y necesita desahogarse con alguien que no la conozca mucho’. Durante el relato ella refiere tener una hija de 15 años que hace más de 20 días que tiene un comportamiento extraño. Ella cuenta que hace más de un año, llegó ayuda de privados y donaciones voluntarias a la comunidad donde ellos residen, y la hija de ella, con 14 años en ese entonces, recibió revistas de adolescentes de las cuales, refiere la madre ‘no se despega en ningún instante, de hecho, hasta tomaba once rápido para poder ir a leerlas o prefería no comer’. Desde ese entonces que comenzó con un aislamiento poco común, además, dejó de ir a la escuela porque según cree la madre, se quedaba hasta tarde leyéndolas. Cuando la paciente cumple 15 años (hace aproximadamente un mes) la madre decide realizarse un cumpleaños con los familiares a lo cual ella se niega diciéndole ‘No quiero que vengan porque se quieren robar mis revistas, ellos saben lo que yo sé y no quiero que ellos sepan más de lo que ya saben o que sepan más que yo’. Además, la madre refiere que hace 20 días encontró a su hija ‘rígida’ y con la ‘boca abierta’ sin generar ningún movimiento más que ese, después de ese acontecimiento la hija le refiere que ‘se estaba camuflando de los demonios que venían desde la montaña para atacarla porque no les convenía que ella estuviera viva’. Luego de ese episodio, durante la once, comenzó con ‘a mover la mano de manera extraña sobre su cara, como abanico, todo el rato, no paraba’. La madre de la paciente de 15 años profesa la religión evangélica y asistir a la Iglesia Evangélica Pentecostal. Además añade que al ver que su hija se comportaba de manera extraña le consulta al Pastor de su iglesia para ver que poder hacer, a lo cual el accede a ir a visitarla y ‘ungirla’. Durante esa ocasión la madre de la paciente relata que la paciente ‘comenzó a gritar diciendo que la querían matar y que ese caballero que le ponía las manos encima le quería leer el cerebro, desde ese día que no se quiere bañar, porque dice que si se lava la frente, donde le toco mi Pastor, va a abrir un portal para que todos podamos ver lo que ella está pensando, además ese día, se le tiró encima a mi Pastor y le pego con las mismas sagradas escrituras en la cabeza y le dijo que no le iba a sacar ninguna información’. La señora Inés refiere que en esa ocasión, el Pastor le indica que a la paciente de 15 años, María de los Ángeles, ‘le habían hecho un mal, y que quizá eso venía de generación en generación, que tenía que orar por su vida porque las maldiciones seguían hasta la cuarta generación y no sabemos si ella es segunda, tercera o cuarta generación’. La señora Inés refiere ‘Me acordé altiro de mi mamá, no me llevo muy bien con ella, la verdad es que no hablamos nada, resulta que ella es media bruja para sus cosas porque es Machi y usted sabe que a nuestro Señor Jesucristo no le gustan esas cosas paganas’ a lo cual la señora Inés indica que se enfrentó a ella culpándola de las actitudes extrañas de su hija y que después de ese día, a la semana siguiente la paciente de 15 años se desapareció de la casa y refiere ‘supuse altiro que la tenía mi mamá, fui hasta donde ella y le quité a mi hija, mi mamá se puso como loca porque estaba en pleno machitún con mi chiquilla, y yo me la llevé igual no más, cuando me iba me empezó a gritar que no me diera cuenta tarde de lo que estaba haciendo, que mi chiquilla tenía un destino y que si la sacaba de su mapu la niña se iba a morir’. La madre de la menor indica que desde ese día, hace aproximadamente una semana, que la paciente de 15 años está encerrada en su pieza, no quiere comer y si lo hace, después lo vomita todo diciendo ‘sé que quieres ver mi interior pero no me vas a matar aunque quieras’ y no se quiere bañar y tampoco deja que la ayuden en ese proceso. La señora Inés refiere que está preocupada por el estado de salud de su hija porque la ha notado más enflaquecida. Como enfermero decido tomar el caso y agendar una visita domiciliaria con la madre de la menor, al momento de la visita la abuela de la menor se encuentra afuera de la casa e impide el paso porque según ella la niña se quedó en el ng’licheñmawe y la medicina winka no puede hacer mucho. Al lograr pasar a la casa, la menor se encuentra encerrada en su pieza, en evidente estado psicótico y alucinaciones, se presenta agresiva e higiene regular. Después de la visita se conversa con la madre de la menor para ver la posibilidad de un traslado hacia un centro asistencial para evaluar su estado de salud neurológica.

...