En Qué Momento Comenzar Con El Jardín Infantil

Seguramente a la hora de ser padres y esperar el nacimiento de un hijo, además de los miedos y expectativas propias del proceso, nos imaginamos inmediatamente varios elementos de su futuro: qué nombre tendrá, cómo será su personalidad, será sano o no, qué le gustará, y en general, nos cuestionamos si tomaremos o no las decisiones correctas, para su “mejor posible” desarrollo.

Dentro de estas decisiones, actualmente está la del jardín infantil en que se educará y a qué edad, deberá incorporarse al sistema educativo.

Muchas veces esta decisión pasa por una opción de los padres, de querer estimular a sus hijos en un lugar en donde tenga experiencias distintas a las que se pueden entregar en el hogar y otras veces, la decisión pasa por necesidad de no contar con redes familiares que puedan ayudar al cuidado de los niños y es en este momento en donde sin importar la edad, se inicia la educación preescolar.

Respecto a lo anterior surgen las preguntas, ¿cuál es la edad correcta para que mi hijo entre al jardín?, ¿es mejor cuando están más grandes?, ¿mientras más pequeños mejor?, entre otras, y como es lógico, al ser padres, surge el gran sentido de responsabilidad de saber que este pequeño ser, depende de nosotros.

Muchas familias optan por incorporar a los niños al jardín, cuando ya han adquirido algún grado de autonomía, como por ejemplo, cuando controlan esfínter y cuando logran comunicarse con los demás con un lenguaje entendible, es decir, aproximadamente desde los 2 años y medio. Cabe destacar que esta opción, es muy beneficiosa ya que permite a los niños crecer durante sus primeros años, en un ambiente de apego seguro y estable, entregado por el hogar, permitiendo así un desarrollo de la seguridad en sí mismos y en general, de la confianza con el mundo que los rodea, aspecto esencial para logar un desarrollo armónico general y un acceso a futuros aprendizajes con una buena base emocional y cognitiva.

No obstante lo anterior, para las familias que no cuentan con esta opción, está la alternativa de las Salas Cuna, en las cuáles se recibe a los niños desde los 84 días en adelante, es decir, menos de 3 meses de edad.

Muchas tendencias dicen que es “antinatura”, separar a los niños tan pequeños de sus familias, sin embargo, no todos tienen esta opción, y existen muchas salas cunas de calidad que generan vínculo de apego con los niños y estimulación temprana que más adelante será muy beneficiosa para su desarrollo. No obstante lo anterior, los padres o cuidadores deben armarse de paciencia, ya que lo más probable es que durante el primer año, surjan algunas enfermedades contagiosas, propias de lugares donde hay niños, sumado a que a tan pocos meses de edad, recién se está fortaleciendo el sistema inmunológico.

Aspecto fundamental en las

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