ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Historia De Fausto El Niño Migrante


Enviado por   •  12 de Octubre de 2013  •  1.497 Palabras (6 Páginas)  •  456 Visitas

Página 1 de 6

LA HISTORIA DE FAUSTO EL NIÑO MIGRANTE

Historia real publicada en el Periódico Reforma

Rodean carencias la cuna de Fausto

Nace el 27 de junio de 1990 en el municipio de Xalpatláhuac. El Platanar no hay agua los habitantes trasportan el liquido en garrafones caminan 2 km para llegar al manantial. Tampoco hay drenaje. La comunidad que tiene dispensario médico es Cuba Libre esta a 20 min. El hospital más cercano esta en Tlapa de Comonfort, el traslado en vehículo demora 45 min por terracería curvada un tramo corto pavimentado, pero no es trayecto seguro.

Las artesanías y la agricultura son las actividades tradicionales, pero el dinero que se obtiene no es suficiente para las necesidades básicas. Algunos obtienen ingresos de la venta de sombreros de palma. Las siembras no dan para mucho: solo se crece maíz y matitas de ejote, pocas se venden la mayoría es para consumo propio. No cae lluvia, no siembran porque no nace la semilla. Los indígenas piden agua al cerro, con cantos y rezos. También venden leña para fogones.

Entre milpas y veredas se mira a mujeres con bebes durmiendo, uno al frente y dos a cada lado. En la pobreza los hijos se convierten en fuentes de ingreso, los varones emigran a E.U para mandar remesas, y las mujeres son vendidas. Las muchachas salen de la secundaria o ni salen y ya las están vendiendo, muchas veces en contra de su voluntad, los papas del novio la piden, la compran y ella se tiene que ir. Se da mucho el machismo, a la mujer la denigran, ay hombres con 2 o 3 mujeres viviendo en la misma casa.

Así era en la cuna de Fausto Armenta.

La primaria bilingüe Luis Donaldo Colosio fue su primer centro de estudios, siempre ha sido una escuela de carencias. En esta escuela los profesores son mil usos, impartían todas las materias, son intendentes, fungen como gestores, abogados y hasta doctores.

La escuela reta a la mentalidad generalizada el suelo americano, como lo han hecho por generaciones.

Fausto acudía a la escuela cuando su progenitor y su hermano mayor abandonaron el hogar para cruzar a la frontera. El se quedo en la montaña. Todos los mixtecos hablaban sobre las bondades de la ciudad foránea.

Los adolescentes y niños comparten los anhelos de viajar al lugar que los sacara de la pobreza.

A pocos meses de concluir al primaria Fausto a la edad de 14 años eligió viajar a Estados Unidos a Nueva York, como todos los del pueblo Abraza Fausto el sueño americano

Fue en las canchas de basquetbol de la montaña de Guerrero donde Fausto Armenta Sabino y otro amigo planearon su viaje a Nueva York. El adolescente mixteco, de 14 años, tenía razones de sobra para dejar su tierra natal El Platanar.

A su alrededor no había oportunidades de empleo por lo cual sus padres, él y tres hermanos vivían "arrimados" en la casa de un tío y en ese hacinamiento también se producían roces y conflictos. Fausto, a diferencia de sus hermanos, tenía mayor cercanía con su madre, la protegía, consentía y jamás le alzó la voz. "Mi hijo es muy callado, muy respetuoso cuando lo regañaba no me respondía, ni siquiera se enojaba, tenía risa mi chamaco", murmura doña Margarita Sabino. Ese 1 de mayo de 2005, Margarita lo tiene presente. Eran las cuatro de la madrugada cuando Fausto salió de El Platanar con una pequeña mochila en la espalda. Con dolor, la mujer vio a su hijo desaparecer rumbo a la ciudad de Tlapa donde a él y a una decena de jóvenes los esperaba un pollero. Sólo le dio la bendición. "Yo le dije vete cuando tengas 15 o 16 años, y él dijo: 'No mami, sí me voy'; me puse a llorar, ni modo mijo que Dios te bendiga", recuerda. A menos de dos semanas de la partida de Fausto, el sonido del teléfono devolvió la tranquilidad a Margarita. Su hijo le anunció que había cruzado sin problema el desierto y la mitad de territorio estadounidense. Fausto se apersonó en Manhattan, Nueva York. Los primeros 24 meses vivió en un departamento cerca de Manhattan con su hermano mayor Juan, su papá y su prima Delfina; luego, los varones se mudaron al condado de Queens. En ese tiempo, mermó la salud de doña Margarita. Sus padecimientos se acentuaron por los conflictos habituales con sus cuñados derivados de la pugna por el terreno que compartían. Fausto convenció a su padre de volver a Guerrero y el indígena se quedó en Nueva York.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (8.6 Kb)  
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com