ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El Espíritu Santo En Presencia De Dios


Enviado por   •  8 de Septiembre de 2011  •  1.997 Palabras (8 Páginas)  •  927 Visitas

Página 1 de 8

El Espíritu Santo en presencia de Dios

En la Palabra de Dios existe un principio espiritual muy descuidado hoy en la Iglesia. Este principio revela el sentir de Dios y lo que puede hacer Dios en medio nuestro. La ignorancia o negligencia en aplicar este principio puede costarnos mucho, especialmente si estamos deseosos realmente de ver manifestada en nuestras vidas y congregaciones la gloria de Dios.

El principio espiritual que vamos a tratar en este dia es que Dios revela primero su presencia, para posteriormente manifestar su potencia. No estamos diciendo que la presencia es mejor que el poder del Espiritu Santo o viceversa, sino simplemente seguir un patrón que aparece registrado en las Sagradas Escrituras.

Analicemos a continuación los diversos pasajes bíblicos, referidos al tema en cuestión:

I. En el Antiguo Testamento, la tierra reconoció la presencia de Dios

1. al leer Exodo capitulos 33 y 34 vemos a Moises interesado en ver la gloria de Dios (33;13), y Dios le responde; "Y el dijo: Mi presencia ira contigo y te dare descanso". Cuando Dios se le revelo a Moises descendiendo en la nube de gloria (34:5) notemos lo que dice el relato: "¡Jehova, Jehova! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad; que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelion y el pecado..." ¿Que hizo Dios alli? Manifestó su Presencia. Luego en el 34:19 recien Dios habla de manifestar su poder; "... hare maravillas que no han sido hechas en toda la tierra, ni en nacion alguna..."

2. En 1 Reyes 8:10-11 leemos que: "...cuando los sacerdotes salieron del santuario, la nube lleno la casa de Jehova. Y los sacerdotes no pudieron permanecer para ministrar por causa de la nube; porque la gloria de Jehova habia llenado la casa de Jehova" ¿Que sucedio alli? Descendio la nube, la gloria o presencia del Señor, que todo lo llenó y entonces nadie podia ministrar con sus dones.

3. En 2 Cronicas 5:13- 14 leemos también: "...entronces la casa se llenó de una nube, la casa de Jehova. Y no podian los sacerdotes estar alli para ministrar (con sus dones), por causa de la nube; porque la gloria de Jehova habia llenado la casa de Dios".

4. En 1 Reyes 19:12 leemos que Elias estaba en una situacion especial cuando necesitaba de la manifestacion del Señor y se encerro en una cueva. Dios lo llama hacia afuera y comienza a manifestarse. Note la secuencia:

a) grande y poderoso viento

b) terremoto

c) fuego

d) Silbo apacible y delicado.

Recien cuando fluyó el silbo apacible y delicado, Elías reconoció la presencia de Dios. El silbo delicado y apacible fue una señal indubitable para Elias, de que Dios estaba presente.

LA IGLESIA, PUEBLO DE DIOS

781 "En todo tiempo y lugar ha sido grato a Dios el que le teme y practica la justicia. Sin embargo, quiso santificar y salvar a los hombres no individualmente y aislados, sin conexión entre sí, sino hacer de ellos un pueblo para que le conociera de verdad y le sirviera con una vida santa. Eligió, pues, a Israel para pueblo suyo, hizo una alianza con él y lo fue educando poco a poco. Le fue revelando su persona y su plan a lo largo de su historia y lo fue santificando. Todo esto, sin embargo, sucedió como preparación y figura de su alianza nueva y perfecta que iba a realizar en Cristo..., es decir, el Nuevo Testamento en su sangre convocando a las gentes de entre los judíos y los gentiles para que se unieran, no según la carne, sino en el Espíritu" (LG 9).

La doctrina del Cuerpo Místico de Cristo

Para explicitar su recomendación, San Pablo se vale de una imagen sumamente expresiva, que siendo uno solo, tiene una gran variedad de miembros, cada cual con su función, y todos al servicio unos de los otros: “así nosotros, aunque seamos muchos, formamos en Cristo un solo cuerpo”.

Se trata de una realidad profunda, que constituye la doctrina revelada del Cuerpo Místico de Cristo, a la cual San Pablo alude de modo explícito.

Según esta doctrina, la Iglesia no es un conglomerado amorfo de individuos, sino un cuerpo organizado, con diversos miembros y sus propias funciones, sobre los cuales Jesucristo ejerce una acción unitiva y vivificadora. Así, es perfectamente adecuada la expresión Cuerpo Místico de Cristo para designar a la Iglesia.

En los diversos textos mencionados, San Pablo resalta ya sea uno, ya sea otro aspecto de esta divina doctrina. Cuando quiere inculcar la necesidad de unión y colaboración entre los fieles, destaca que nuestra unión con Cristo es tal que forma con Él una unidad o cuerpo único. Empero, cuando necesita denunciar a los falsos predicadores que cuestionaban la posición única de Cristo, insiste sobre todo en que Él es la verdadera Cabeza de la comunidad cristiana, o sea, católica, apostólica y romana, punto de partida de todo el influjo vital en la Iglesia y su Jefe indiscutible.Aquí cabe observar que concepciones erróneas acerca del Cuerpo Místico de Cristo recorren toda la historia dos veces milenaria de la Iglesia, a tal punto que el Papa Pío XII se sintió obligado a escribir una encíclica especial para refutar las falsas doctrinas en curso en los medios católicos de su tiempo, y que llegan hasta nuestros días. Se trata de la encíclica Mystici Corporis Christi, del 29 de junio de 1943, cuya lectura recomendamos a quien quisiera profundizar en el asunto.

Concilio Vaticano II

Fecha de inicio 11 de octubre de 1962

Fecha de término 8 de diciembre de 1965

Aceptado por Iglesia católica

Concilio anterior Concilio Vaticano I

Convocado por Juan XXIII

Presidido por Juan XXIII (1962)

Pablo VI (1963-1965)

Asistencia 2450 obispos

Temas de discusión Promover el desarrollo de la fe católica.

Lograr una renovación moral de la vida cristiana de los fieles.

Adaptar la disciplina eclesiástica

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (12.2 Kb)  
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com