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Arte En Mesopotamia


Enviado por   •  25 de Abril de 2012  •  2.624 Palabras (11 Páginas)  •  1.004 Visitas

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VI.- ARTE EN MESOPOTAMIA

* Primer período sumerio. Preh.-3000 a C.

(antes de la escritura)

ARTE

SUMERIO * 2o. Período sumerio. 3000 a C.-2470aC.

(después de la escritura) PRESARGÓNICO

*Acadio. 2470 a C.-2285 a C.

*Neo-sumerio. 2285 a C.-2015 a C.

Primer período sumerio.

La civilización de Mesopotamia (tierra fértil entre ríos) se desarrolló en valles cercanos a los ríos Tigris y Eufrares donde la tierra era muy fértil. Fue el lugar donde la gente se estableció por primera vez, así las villas y las ciudades empezaron a florecer.

El área era muy extensa y gran variedad de tribus se fueron estableciendo, por esto la historia de la antigua Mesopotamia es una larga serie de conquistas por una variedad de personas.

La civilización sumeria se remonta hacia el siglo 4500 a C. cuando un grupo de gente abandona su forma de vivir nómada para establecerse en Mesopotamia. La región se llamaba Sumer. Ellos formaron comunidades agrícolas con mercados alrededor de sus templos. Estos templos sumerios sirvieron como centros de vida espiritual y de comunidad.

Aunque sabemos poco de los sumerios, Sumer es la primera civilización del mundo, y no una simple cultura, como tantas hay escalonadas a lo largo de nuestra inmensa prehistoria, sino el resultado de todas esas culturas en progreso, su fruto más perfecto, la civilización, plena y autentica, con la riqueza de vida, la perfección y la complejidad que implica: la organización social y política, el establecimiento de ciudades y de Estados, la creación de instituciones, de obligaciones y de derechos, y la producción organizada de alimentos, de vestidos y de herramientas, la ordenación del comercio y de circulación de los bienes de intercambio, la aparición de formas superiores y monumentales del arte, los comienzos del espíritu científico y de un invento prodigioso del que no se puede medir toda la importancia, un sistema de escritura que permitía fijar y propagar el saber.

Todo esto fue creado e instaurado por los sumerios allá por el cuarto milenio antes de nuestra era, en la región de la baja Mesopotamia, al sur de la Bagdad moderna, entre el Tigris y el Eufrates.

No había una nación sumeria sino pequeñas ciudades estado, cada una tenía algun dios. La ciudad creció en poder, aparecen los templos llamados “Ziggurats”, montaña escalonada hecha de ladrillos de adobe, arcilla, cocidos al sol. El ziggurat es una montaña simbólica que satisfiso el deseo de crear un monumento que acercara el espacio entre el pueblo y sus divinidades. El ziggurat más famoso es la Torre de Babel, ya no existe pero sus ruinas son muy impresionantes por su tamaño.

Ziggurat de la ciudad de Ur

Los arqueólogos han encontrado evidencia de una rica y floreciente civilización en el sitio llamado Ur. Mucha de esta evidencia viene de un cementerio antiguo donde se entontraron enterradas joyas, esculturas, instrumentos musicales, etc.

Una impresionante caja de sonidos de una lira nos dice que los sumerios eran grandes artistas, está decorada con una cabeza de toro en hoja de oro. La piedra semipreciosa llamada lapizlasuli se usó como decoración en la barba de los hombres y para otros detalles.

La práctica de combinar figuras con detalles humano-animal fue muy utilizada. Generalmente era usada la figura del toro. Se fascinaron con este animal por su fortaleza.

El estandarte de Ur, una obra artística muy bella, cuando lo hallaron era tal su deterioro que podría identificarse con cualquier cosa o con nada. Una vez restaurado, el arqueólogo Woolley pensó que se trataba de una enseña erguida en lo alto de un mástil y de ahí el nombre de "estandarte". Hoy se aventura que quizá fuera la caja de resonancia de un arpa, pero su función original sólo es una conjetura. Lo cierto es que el marco original de madera estaba descompuesto y el betún, que hacía de adhesivo de las teselas que forman las bellísimas escenas de la decoración de sus cuatro paneles, se había desintegrado. Excavando centímetro a centímetro, Woolley lo extrajo derramando sobre las teselas sueltas parafina caliente y aplicando lienzos para darles consistencia. Los bloques así consolidados fueron levantados y colocados frente a un espejo, pudiéndose comprobar que el desarrollo de los motivos ornamentales era correlativo y que los paneles admitían la recomposición, afortunadamente sin perder su coherencia. De este modo fue posible reconstruir exactamente el delicado mosaico, en sus dos caras principales llamadas "de la paz" y "de la guerra", así como las laterales. En la escena "de la paz" se representan animales, pescados y otros bienes traídos en procesión ante el rey que celebra un banquete. Las figuras sentadas, vistiendo las repetitivas faldas de vellón de oveja o flecos gruesos, beben con el acompañamiento de un músico que toca un arpa. Escenas de banquete como esta son comunes sobre los sellos cilíndricos de este periodo, como ocurre con el sello de la reina Pu-Abi. El panel "de la guerra" muestra una de las representaciones más tempranas de un ejército sumerio. Los carros, cada uno tirado por cuatro onagros, pisotean a sus enemigos; los soldados de infantería, con capas, llevan lanzas y hachas. Todo delante de un rey que, a su vez, sostiene una lanza. El exquisito objeto apareció en la esquina de una de las cámaras de la tumba, sobre el hombro de un hombre.

Antes de darse por terminada la excavación, Woolley había profundizado 14,50 m., comprobando que los últimos 2,5 estaban compuestos por una arcilla, estéril y endurecida, sedimentada por una inundación del territorio superior a los ocho metros de agua, que tuvo lugar entre el 4000 y el 3000 a.C. El arqueólogo sabía que unos colegas que trabajaban en el norte de Mesopotamia habían encontrado los mismos indicios de anegación, y que no lo habían publicado aún. Así que se les adelantó al dar la noticia de la posible prueba del bíblico Diluvio Universal,

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