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DIDÁCTICA DE LA NARRACION Y LA DISERTACION


Enviado por   •  23 de Junio de 2015  •  419 Palabras (2 Páginas)  •  156 Visitas

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DIDÁCTICA DE LA NARRACION Y LA DISERTACION

Aebli, Hans.

De la esencia de la comunicación verbal se derivan las reglas metodológicas correspondientes a la narración y disertación. Su ámbito de validez va, más allá de las formas elementales de enseñanza y afecta a cualquier forma de dialogo del educador con niños y adolescentes.

Adaptación a mentalidad del alumno y de la clase

La intencionalidad de; la comunicación verbal está orientada a hacer revivir en el oyente contenidos psíquicos que están vivos en el narrador. Pero estos, solo pueden activar en el interior del que escucha representaciones, conceptos y demás contenidos vivenciales que ya tiene; a partir de ellos ha de producirse cualquier enseñanza. De aquí que se platee al profesor la exigencia de adaptarse a la mentalidad del alumno y de la clase. Bajo este postulado general se ocultan multitud de exigencia parcial, que exponemos a continuación.

Adaptación al nivel de desarrollo del alumno.

El profesor ha de tener en cuenta en primer término, el nivel de desarrollo del alumno. Toda etapa del desarrollo infantil posee un caudal de representaciones, conceptos, operaciones mentales. Esto se refleja en el vocabulario de cada nivel de edad.

La psicología infantil investiga y describe las peculiaridades psíquicas de las distintas etapas del desarrollo; aquí nos limitamos a aludir brevemente a su orientación general. Cuando menos edad tenga el niño, cuanto más indiferenciados y globales serán sus representaciones y conceptos. Los conceptos son más simples, con frecuencia unidimensionales, mientras que en un adulto son complejos y multidimensionales. De modo correspondiente, las operaciones del pensamiento infantil son menos fluidas cuando menor edad tienen. Debido a su menor movilidad, las operaciones mentales del pensamiento apenas pueden aun cohesionarse para construir sistemas coherentes.

Esta falta de coherencia no es lo único que caracteriza la imagen del mundo que forma el niño. En los siguientes capítulos veremos que se pueden concebir el aprendizaje y el reconocimiento del niño y del adolescente como procesos constructivos. Diariamente se agregan nuevas aportaciones a diversos ámbitos de experiencia, se construyen nuevas representaciones y conceptos.

En clase el profesor debe tener en cuenta el estado de repertorio mental del adolescente. Ha de controlar su vocabulario para que los significados no sean más complejos de lo que: permite el nivel de desarrollo del alumno. Las correlaciones que surjan en las narraciones y descripciones no han de exceder a la capacidad de captación del alumno.

El pensamiento infantil está más vinculado a lo perceptivo- concreto que de pensamiento del adulto. Las descripciones

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