ESPLENDOR Y OCASO DE LOS CACIQUES MILITARES. SAN LUIS POTOSÍ EN LA REVOLUCIÓN MEXICANA

ESPLENDOR Y OCASO DE LOS CACIQUES MILITARES.

SAN LUIS POTOSÍ EN LA REVOLUCIÓN MEXICANA Romana Falcón

La riqueza de San Luis Potosí por las vetas de plata, han sido las que atrajeron a los primeros conquistadores Europeos y así mismo en donde surgieron los famosísimos distritos de EL Catorce, San Pedro, Matehuala, Cedral, Venegas y Guadal cazar.

En 1810 surgió una gran etapa de depresión económica y política que solo logro superarse hasta finales del siglo XIX. La economía Potosina se dinamizo, por la gran medida del capital extranjero y la inversión de las vías férreas que empezaron a integrar económica y políticamente a las diversas regiones de la identidad así mismo como a Estados Unidos.

Esto hiso que florecieran las minas, fundidoras, las fabricas de cerveza, tabaco, textiles de lana y algodón.

San Luis Potosí estaba regido por familias relacionadas por vínculos económicos, políticos, y matrimoniales. Estaba claramente determinada por los intereses de los grandes propietarios, tanto por que el hecho de que los nombres formales, eran de relaciones personales entre autoridades y hacendados, el conducto por el cual estos ejercían una influencia política decisiva.

Las grandes haciendas constituían el eje económico, político del campo Potosino. Pero el problema de organización económica de las haciendas daba por resultado un diversificado sistema de estratificación social. La mayor parte de los campesinos potosinos vivían en extrema pobreza a diferencia de los terratenientes.

Por lo tanto así se hicieron estallar grandes protestas y rebeliones a lo largo del porfiriato. Estos levantamientos se concentraron en la Huasteca y en el Valle del Maíz, zonas en donde había una alta proporción de indígenas cuyos habitantes de San Luis Potosí aun conservaban el idioma, costumbres, incluso la estructura del poder que ya tenían antes de la llegada de los españoles.

Estas republicas de indios solía contar con una organización como comunidad agraria. Fue cuando Días asumió el poder y las líneas férreas empezaron a unir a Tampico, y así mismo se rompió con el aislamiento en que habían vivido estas pequeñas “REPUBLICAS DE INDIOS” de San Luis Potosí.

En 1849 estallo en la Huasteca una rebelión calificada como “el primer experimento comunista en el País” y siete años más tarde, unos indios huastecos se levantaron exigiendo “muerte a la propiedad privada”.

Durante el porfirato el malestar no solo difundía entre las gradas más bajas de la sociedad, ni tampoco eran los conflictos agrarios sus únicas raíces si no también el poder de los caciques y funcionarios que tenían el poder político y buena parte de la riqueza.

Un conjunto de poderosos no solo se turnaban diputaciones, jefaturas políticas, cargos de ayuntamientos y consejos de electores si no dominaban políticamente y económicamente estas apartadas regiones y gozaban del poder en los diversos partidos en que se dividía en San Luis Potosí.

En suma, el jefe político era un elemento fundamental de quien dependía, el grado de integración y de centralización de la estructura política.

La caída del antiguo régimen y la dispersión del poder (1910-1925)

Cuando Díaz abandono el país, en mayo 1911, desapareció la figura central que, a falta de verdaderas instituciones, habían conferido unidad y coherencia a todos los actores y procedimientos políticos durante décadas.

En San Luis Potosí, la revolución hizo que los conflictos locales fueran el eje donde gira toda la estructura de poder.

En la revolución hubo pueblos que demandaron la restitución de tierras que les habían dejado sus antepasados. Con esta demanda ponían en cuestión, y de manera profunda, todo el orden social. Su rebelión estuvo concentrada en pocos puntos de la entidad, en buena parte del anti plano potosino había una escasez relativa de comunidades agrarias

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