El Barrio Y Su Presencia En La Escuela

El barrio no sólo es el espacio físico, sino que la gente que lo habita, que le da forma, sentido e identidad. La escuela observada se encuentra en un barrio popular del sur del Distrito Federal, cerca de una de sus vías rápidas más importantes. No es una zona completamente pavimentada, presas construidas por los vecinos, mucho polvo, es una zona que visitándola puedes encontrar muchos lagos. Esta es más o menos la zona en la que está la escuela, una zona pobre que parece más pobre cuando se le contrasta con el edificio de la escuela. La escuela primaria, junto con una escuela preescolar, ocupa una manzana completa. Al decir de una maestra parece una construcción de una escuela secundaria, tiene, además, una sección pre construida. Podría decirse que es un edificio agradable.

El barrio está instalado físicamente fuera de la escuela, pero aun cuando está fuera, desde el patio, la dirección y los salones se ven sus casas, el terreno polvoso, los cerros, los camiones y su gente.

En la lectura se distingue por puntos, uno de ellos es “La explanada de la escuela: un lugar de reunión del barrio”, la explana parece convertirse en un espacio desde el cual la gente del barrio intenta acceder a la escuela. Aunque los padres de familia son quienes generalmente se instalan fuera de la escuela se pueden encontrar hermanos, exalumnos o simples vecinos que se acercan a ver qué se hace adentro. En la hora del receso se destaca la llegada de vendedores ambulantes, jóvenes encima de las bardas y niños que están atentos y dicen que aunque no asisten a la escuela van a verla. Llega un momento en donde la explana toma la apariencia de un zoológico, en el momento en que la gente da de comer a los animales: las señoras estiradas, los niños agachados extendiendo sus brazos a través de una reja y tratando de alcanzar lo que les ofrecen. Todo sucede en un intercambio entre el exterior y el interior de la escuela, los que asisten a la escuela y los que tienen o quieren tener algo que ver con ella. Así de alguna manera la explanada se convierte en un centro de reunión social. Los hace coincidir fuera de ella, en el límite de la escuela y del barrio.

Otro de sus puntos es “La presencia del barrio en la escuela a través de su gente”, la escuela está en el barrio y muchos de quienes la conforman están al pendiente de ella dispuestos a participa como puedan en lo que allí se realice. Son pocas las actividades que planea la escuela para que el barrio participe, aunque la explanada permite cierto acceso al acontecer escolar, hay algunos habitantes del lugar que buscan estar más cerca de lo que sucede dentro. Aumentando la altura de la barda se trata de evitar que algo molesto y ajeno entre en la escuela, es decir, se decide levantar la barda para impedir la presencia de los jóvenes de las bandas aunque no logre impedirse el interés de la gente del barrio por lo que sucede allí. Por otra parte, los niños forman

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