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Ensayo Gung Ho


Enviado por   •  8 de Noviembre de 2011  •  2.430 Palabras (10 Páginas)  •  1.000 Visitas

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INTRODUCCION

En este trabajo consultamos varias fuentes de información, con lo cual pretendemos que todas las personas que puedan acceder a este trabajo puedan visualizar todo lo referente a los NEOCLÁSICOS, su influencia en la economía, que escuelas neoclásicas pre denominaron, quienes fueron los actores y como surge varias criticas de las teorías neoclásicas.

Dentro de esta consulta vemos todo el recorrido histórico de los economistas de los siglos XIX y XX, vamos a poder visualizar cada punto de vista y cada argumento que cada uno de estos protagonistas tienen.

Adicionalmente no es solo la economía actual lo que vivimos el día a día, o lo que nos muestran a diario los medios de comunicación, y que en muchos casos no sabemos ni entendemos de los que nos hablan, a parte de devolvernos en el tiempo y analizar e indagar como fue esta economía podremos hacer una gran comparación a la economía actual, y al finalizar este trabajo podremos hacer un gran paralelo y sacar nuestras propias conclusiones.

NEOCLASICOS

La economía neoclásica es el producto de varias escuelas de pensamiento en economía. No todos están de acuerdo acerca de qué se denomina economía neoclásica, y el resultado de esto es una amplia gama de aproximaciones neoclásicas a varias áreas problemáticas y dominios; partiendo de las teorías del trabajo a teorías de los cambios demográficos.

Economía neoclásica o escuela neoclásica es un concepto impreciso utilizado en economía; ciencia política, etc., para referirse en general a un enfoque económico basado en el análisis marginalista que incluye la percepción del Homo œconomicus

El economista neoclásico por excelencia es Alfred Marshall, quien es considerado el fundador de la escuela. Entre los neoclásicos modernos puede distinguirse, entre otros, a los nuevos clásicos (muchos de los cuales son partidarios del monetarismo) y los seguidores de la síntesis neoclásica.

Entre los supuestos de que parte el enfoque neoclásico se encuentra que el comportamiento económico surge del comportamiento agregado de los individuos (u otro tipo de agentes económicos) que son racionales y tratan de maximizar su utilidad o beneficio mediante elecciones basadas en la información disponible.

Hoy en día, el enfoque de la escuela neoclásica predomina entre los economistas. Aunque existen muchas críticas a varios de los supuestos de la escuela neoclásica, frecuentemente algunas de estas críticas han sido incorporadas en nuevas versiones de la teoría neoclásica (por ejemplo, la escuela neokeynesiana está basada tanto en principios neoclásicos como keynesianos).

La escuela neoclásica se originó a partir de los marginalistas quienes, buscando introducir rigurosidad y una metodología que se asemejara más a las ciencias físicas, hicieron una crítica -a veces implícita- a los conceptos y métodos utilizados por la economía clásica (o economía política) incluyendo las ideas de Adam Smith; David Ricardo; John Stuart Mill y Karl Marx.

Mucha de esta crítica se centró en el reemplazo de los conceptos de la teoría del valor-trabajo por la de teoría del valor subjetivo y la explicación centrada en clases o grupos de personas por el individualismo metodológico.

El término “neoclásico” mismo se originó en una crítica global de Thorstein Veblen8 - fundador de la escuela institucionalista (norte)americana- quien lo utilizó para referirse a quienes el consideraba compartían las percepciones no científicas de la escuela clásica, especialmente la utilización de la teoría del valor, incluyendo la tentativa marginalista de reemplazarla con la teoría del valor subjetivo y la percepción que “más es necesariamente mejor”. Esto incluye a quienes son generalmente considerados marginalistas.

El término se generalizó para referirse a los seguidores de la "economía marshalliana". El proyecto de Marshall puede ser visto como una tentativa de sistematización y formalización de la “economía clásica”,10 lo que lo sitúa en el centro específico de la crítica de Veblen. La visión de Marshall y sus seguidores -llamados inicialmente marginalistas ingleses o marshalianos- es lo suficientemente distinta de otros marginalistas como para constituir una percepción distintiva, a pesar de las raíces comunes en el marginalismo.

Además otros marginalistas -por ejemplo, Knut Wicksell y Carl Menger- se consideran fundadores de escuelas (escuela sueca o de Estocolmo y escuela austríaca respectivamente). Léon Walras es generalmente estudiado entre los matematizadores de la economía. Y seria conducente a error sugerir que solo Marshall y sus seguidores son marginalistas.

Alfred Marshall y los neoclásicos a finales del siglo XIX, ha tomado ya una sofisticación elevada por medio de una ideología metafísica consistente en la empresa como instrumento del mercado. Si la empresa es, para estos ideólogos, la herramienta de la Libertad, los consumidores son los objetos sublimes del mercado pletórico.

Según el postulado neoclásico “toda oferta genera su propia demanda”, la economía es motorizada por la oferta y por lo tanto todos los esfuerzos del Estado deben estar vinculados a fomentar el ofrecimiento de bienes.

Los neoclásicos entienden que es imposible que exista sobreproducción debido a que cualquier aumento de la oferta se traduce automáticamente en un

incremento proporcional de la demanda. De esta forma, deben diseñarse políticas sin preocuparse de la demanda. La reducción de los impuestos a las ganancias de los empresarios puede servir de ejemplo para incrementar la inversión y la oferta de bienes.

Sin embargo, esta lógica condujo a la crisis más profunda del capitalismo. En efecto, la crisis de 1929 fue un conflicto de “sobreproducción relativa”. Durante la década del veinte se produjo en Estados Unidos un crecimiento abrupto de la oferta que al ser acompañado por la demanda, generó un exceso de oferta de mercancías. Fue relativa, no porque la comunidad no demandó, sino porque no se contaron con los ingresos suficientes para hacerlo.

La sobreproducción en el capitalismo se traduce en crisis debido a que genera una caída de precios, es decir, un proceso deflacionario que produce una disminución de la tasa de ganancia de los empresarios con la consiguiente caída de la inversión, aumento del desempleo y reducción de los salarios de los trabajadores.

la llamada teoría keynesiana. Según John Maynard Keynes, a diferencia de los neoclásicos, el motor de la

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