IMORTANCIA DEL DIBUJO HECHO A MANO ALZADA EN LA ARQUITECTURA

IMPORTANCIA DEL DIBUJO HECHO A MANO ALZADA EN LA ARQUITECTURA

Marcelino Vásquez P.

El dibujo a mano alzada siempre ha sido una herramienta imprescindible en la arquitectura, por ser una práctica indispensable en la elaboración del proyecto arquitectónico. El dibujo, además de ser el inicio del proceso arquitectónico, es también determinante en cada una de las fases que van definiendo las formas de diseñar y construir edificaciones, donde arte y funcionalidad se acoplan para crear el espacio que el ser humano requiere.

La capacidad creadora e imaginativa del arquitecto desarrolla una alta relación entre el ojo, el cerebro y la mano; para poder plasmar las imágenes que concibe la mente, ésta debe apoyarse en la mirada y en la mano que dibuja. Entonces, dibujar es observar, analizar y representar una realidad o idea. Esta colaboración tríadica es un canal de comunicación perfecta que permite al proyectista desplegar una actividad dialógica, pues el dibujo beneficia a la intelección, por lo tanto el arquitecto reflexiona consigo mismo durante su progreso creativo. En tal sentido, dibujar, no solo es mover la mano; al igual que toda disciplina artística, el dibujo exige mucha práctica, es un ejercicio constante, se aprende con paciencia; se requiere determinación, aplicación de la mente y educación de la visión y de la mano.

Michael Draves, arquitecto y catedrático norteamericano, lamenta la falta de práctica del dibujo tradicional en arquitectura, y de esto responsabiliza a la Edad de las computadoras. Si bien reconoce la ventaja de la tecnología al presentar un producto final, asimismo resalta que el acto de dibujar es vital para el proceso de diseño. Al respecto señala que “La arquitectura no puede divorciarse del dibujo, no importa lo impresionante que la tecnología se ponga. Los dibujos no son sólo los productos finales: Son parte del proceso de pensamiento de diseño arquitectónico. Dibujar y expresar la interacción de nuestras mentes ojos y manos. Esta última afirmación es absolutamente crucial para la diferencia entre los que dibujan para conceptualizar la arquitectura y los que utilizan el ordenador desde un principio”.

Efectivamente, el dibujo hecho a mano no debe separarse de la arquitectura, ya que es un instrumento de expresión valioso, un campo único e irrepetible que potencia un conjunto de experiencias, que es imposible reconocer en los nuevos sistemas de dibujo asistidos por la tecnología. Si bien los avances tecnológicos se ligan al dibujo hecho por computadora, a pesar que éste tenga gran demanda a nivel mundial y ser una herramienta de trabajo indispensable que puede facilitar cualquier tarea, continúa siendo necesario saber cómo utilizar las propias manos.

En los momentos actuales es posible que se mal interprete el papel del

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