LECTURA E ILUSTRACIÓN: HERRAMIENTAS PARA EL DESARROLLO AUTÓNOMO

En el proceso de evolución de las sociedades, las instituciones establecidas por las mismas, son agentes promotores de los cambios que afectan directamente su estilo de vida. Es así que las actividades básicas del ser humano se modernizan transformando aquellas que cotidianamente son necesarias para la formación del sujeto. Teniendo en cuenta lo anterior, una de las principales y tradicionales vías de desarrollo y desempeño es la educación, que permite la existencia de un nivel formativo basándose en la organización estructurada de los procesos que se van a llevar a cabo (currículo)*. Sin embargo, para la adquisición de los conocimientos se cuenta con diversos estilos de aprendizaje que caracterizan a la persona según la disposición que este tenga para hacerlo. Por esta razón, varios autores con sus escritos pretenden impulsar las capacidades autodidácticas en los individuos.

Aparece como primordial preocupación, la falta de hábitos educativos que un ser por si mismo pueda lograr; de allí que el grado de comprensión y aceptación de la lectura es mínimo, pues el tiempo dedicado a esta labor no es el suficiente para las exigencias de la misma; la compenetración con lo escrito requiere dedicación para entender el lenguaje usado por quien lo emplea, es decir interpretar lo que realmente se propone mas allá de sus palabras, así que la lectura no se debe tomar a la ligera.

Aquí juega un papel muy importante la autonomía, (que al contrario de lo que algunos piensan, este aspecto, no tiene nada que ver con lo biológico) ajena a cualquier interpretación cronológica, y que se consigue solo con decisión, la cual lo arroja a una independencia benéfica para su avance.

El entorno moderno, es directo responsable de la falta de interés hacia la lectura. Hoy se encuentra una nueva generación de personas, a la expectativa de información puntual y concreta, además, esta debe llegar de manera inmediata y sin esfuerzo; por lo tanto, no es posible llevar a cabo el trabajo de interpretación que procura el acto de leer. Unido a esto aparece la búsqueda de soluciones a situaciones cotidianas (p. ej. consultas escolares) que no dan espacio a la reflexión con un texto; la única preocupación es encontrar aquello que se solicita en el momento sin detenerse a pensar en la actividad, solo en la respuesta; ese tipo de prácticas pueden hacer caer al sujeto en errores comunes, como creer que en lo leído no se dice nada, y la realidad es que nada se comprendió.

* es claro que el currículo no es algo absoluto, es una herramienta para la organización y el control de la educación, pero este no es el único factor que permite La instrucción en un sujeto.

Pero aunque los anteriores son factores que impiden explotar a fondo un escrito, hay uno al que el ser humano se acostumbra y es más nocivo que estos: la carencia

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