La Discriminación Y El Racismo

Siempre soñé con triunfar y destacarme en mi campo laboral, sin embargo puse mis pies sobre la tierra y me di cuenta de que aquí la realidad es cruel. Necesitaba buscar nuevas fronteras…llegue a la “tierra prometida” en busca de éxito, y me encontré con un mundo totalmente diferente al mío, más prospero en cuanto a oportunidades laborales, pero a la vez más duro en cuanto al trato social que recibí, y es que es muy difícil pensar en el éxito laboral cuando apenas puedes sobrevivir dignamente en un lugar donde más pesa la clase o condición social, que las aptitudes y ganas de triunfar.

Sucesos como estos nos resumen la dura realidad que viven algunas personas desdichadas que se ven menospreciadas y excluidas de muchas oportunidades, y solo por el hecho de ser consideradas “diferentes” a otras; y el principio de todo esto esta en la discriminación social. La discriminación es el comportamiento negativo con respecto a miembros de un grupo diferente, hacia el cual se tienen prejuicios y estereotipos determinados. Es razonable pensar que en un principio se trataba de una discriminación superficial y lisa, la cual se vio reforzada por sentimientos etnocéntricos, luego xenófobos e inclusive racistas, siempre sustentados en prejuicios.

Podemos nombrar varios ejemplos, pero que mejor que observar y analizar nuestra propia realidad actual: El éxodo de varios compatriotas bolivianos hacia lugares donde hallar un mejor futuro económico, como la Argentina, Brasil, etc. trajo consigo un repudio injustificado por parte de los anfitriones, los cuales sustentados en bases etnocéntricas consideran como una “invasión forastera” la llegada de emigrantes de otros países, ¿ya se nos olvidaron las raíces culturales que tenemos? ¿Dónde quedaron aquellas ideas de formar una sola nación?

En muchos casos, la llamada “cultura oficial” se ha empeñado en ignorar dichas ideas, es más, por todos los medios se ha tratado de crear una idea contraria, manipulando razones ideológicas y económicas, revelando también la existencia de sentimientos discriminatorios y racistas, y es que siempre se pretende pertenecer a una cultura que se considera superior, aunque no sea la propia. La historia ha enseñado que estos conceptos discriminatorios son un camino peligroso, porque nunca se saben donde terminan. Un ejemplo extremo de hasta donde pueden llegar fueron las prácticas racistas y xenófobas que se registraron durante la segunda guerra mundial.

La discriminación es una muestra de las distancias que se establecen entre los pueblos y entre los hombres, por el rechazo a lo que entienden como diferencia de unos respecto de los otros.

Lamentablemente la discriminación comienza en la vida cotidiana de los individuos, con el rechazo al otro, al que es diferente, al que es distinto, por tener otro origen, otro color de piel, otra contextura física, pertenecer a una determinada religión

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