La Ley De Hipocrates

LA LEY DE HIPÓCRATES Y EL PERFIL DEL CLÍNICO

La medicina es una profesión que no solo engrandece al ser humano por el prestigio que se quiere sino por los valores y el tipo de persona que representa ser un buen médico, y muy a pesar de todos los prejuicios o infortunas que tenga como modo de vida es gratificante en el sentido de que se necesita tener cualidades que no solo son innatas sino que también se van refinando con el paso del tiempo hasta que por fin se ponen a prueba demostrando que se es un buen médico y que finalmente se comprueba que “no se escoge a la medicina, sino que la medicina nos escoge a nosotros.”

Ahora también al hablar de los médicos hay que recordar que no medico es aquel que solo sabe muchas cosas técnicas y normas rígidas que se aprenden solo en libros, o aquel que está apoyado siempre en los últimos avances tecnológicos y auxiliares de gabinete para realizar diagnósticos correctos, por el contrario el buen medico es aquel que con sus sentidos, con el conocimiento de las bases biopsicosociales del hombre y con un amplio juicio sobre la toma de decisiones diagnostica y trata al paciente; pero esto solo se puede lograr con experiencia y normas correctas de acción médica.

Dentro de las normas de acción correcta cabe destacar que el clínico no solo ve sino observa, no solo oye sino escucha, y dentro de todo pued3e interpretar el silencio del paciente, sus gestos y movimientos que pueden expresar más de sus sentimiento y emociones que las palabras que pueda decir, puede también realizar un buen interrogatorio y que esta consiente que esto asegura y da casi todo el diagnostico porque a pesar de su intuición no deja de aprender y conceptualizar conocimientos en favor del paciente, ya que él será un eterno estudiante si es que quiere ser mejor cada día.

Y por el otro lado la experiencia cuando se toma de manera adecuada y pro del bienestar del paciente se vuelve un arma muy favorable que no solo facilita nuestra labor como médico sino que nos acerca más a los pacientes y nos permite analizar todo de distintos puntos de vista

Otro punto importante es el de ser siempre humanitario y tener tanto buen pensamiento como buen corazón para actuar en pro del paciente que es por quien se trabajó y no solo en favor de los intereses propios o de la sociedad siendo respetuoso, humilde, sincero y comprensivo y jamás permanecer ajeno a los problemas que en general alteran al mundo social, económico y políticamente; y como cualidad también muy presente el buen medico tienen que tener vocación de aprender y de querer compartir sus conocimientos con las futuras generaciones para mejorar sus conocimientos y también seguir aprendiendo ya que como todos somos diferentes hay muchas maneras más de aprender cómo comunicarnos y como tratar de diferente maneras una misma afección y por ende tiene que tener mucha afinidad con el proceso de investigación y método científico porque no solo se es una persona de ciencia si no también una persona que tiene ética y moral

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