Mi Primera Experiencia Con El Trabajo Docente

Introducción

La labor de los maestros tiene gran dificultad, pues el trabajo dentro de un grupo requiere de una gran cantidad de habilidades por parte del maestro para atender a la gran diversidad de situaciones que pueden generarse a partir de la diversidad de los alumnos. El establecimiento de reglas puede ayudar en dicha labor al igual que el empleo de diferentes técnicas en las que se pueda emplear la información a transmitir. Sin duda los maestros han de ser capaces de una gran serie de estrategias para ayudar a los niños en todos los campos de su desarrollo.

Durante el desarrollo de este escrito describiré la complejidad del trabajo docente y de los factores que influyen en la dinámica del aula, a partir de mi experiencia con el trabajo docente, realizado en un segundo grado de una escuela primaria.

“Toda escuela y todo maestro necesita una estructura de trabajo constituida para que dé cabida a la flexibilidad, pero también lo bastante sistemática como para asegurar que los niños puedan avanzar. Para el maestro el problema básico es el de cómo reconciliar la heterogeneidad del conjunto de niños que constituyen una clase con la necesidad de aprender de forma que se dé la cantidad optima de aprendizaje”.

Joan Dean

Para adentrarme en el tema hablare de una manera personal sobre esta primer contacto con el trabajo docente, de una forma general a partir de dicha práctica, que resulto ser agradable a pesar de las dificultades que se me presentaron al principio, la primera de ellas y creo la de más importancia fue la inexperiencia, pero el adentrarme poco a poco en el trabajo docente a lo largo de este semestre y a través de la teoría, me proporciono algunos elementos para enfrentar dicho obstáculo, en él descubrí que una herramienta esencial para desempeñar esta labor es la “planeación”; que el papel que desempaña es servir de guía, dirigiendo siempre el trabajo dentro de un aula. La planeación de clase hecha a partir de una planeación semanal, en lo personal me proporciono mayor seguridad en el momento de desarrollar actividades frente al grupo.

“el proceso real de organización en el aula implica seleccionar, de entre una serie de formas diferentes de hacer las cosas, las que se adecuan a la situación particular, hay que ser capaz de prever los problemas y evitarlos mediante la planificación cuidadosa, especialmente en puntos de cambio y actividad. También hay que enseñar a los niños a trabajar como se considere mejor, empleando los recursos de tiempo y espacio lo mejor que se pueda. Además, hay que ser capaces de controlar a los niños en grupos e individualmente.” (Joan Dean pp.020)

Realmente el hecho de realizar una planeación es algo muy complejo pues en mi caso, el desconocer al principio sobre su composición, dificulto en gran medida su elaboración, para ello fue necesario en primer lugar la observación de un grupo de alumnos, de dicha observación se pudieron extraer gran cantidad de rasgos que posteriormente se tomaron en cuenta, como los son: las necesidades que los alumnos tienen, sus características en cuanto a la conducta y sus niveles de aprendizaje, y a lo que al aula se refiere; fue de gran apoyo conocer los materiales y recursos que estaban disponibles para llevar a cabo las actividades, al igual que conocer el espacio disponible de acuerdo al número de alumnos.

Al sentarme a realizar mi planeación teniendo ya el conocimiento de los contenidos que iba a abordar, creo que el principal puto que tome en cuenta fue el tiempo, para esto, realice una distribución por día y semanal del tiempo por asignatura que en este caso fueron de español y matemáticas, continuando con la investigación y revisión de algunas estrategias didácticas que podría utilizar, pues mi conocimiento sobre estas era muy pobre y casi nulo, lo que me obligo a apoyarme con algunos de mis compañeros para conocerlas y saber cómo ponerlas en práctica.

Algo de gran importancia que considero; es el establecimiento inicial de un propósito, de un fin, al que se pretende llegar en el trabajo con los alumnos, mediante la elaboración de todas las actividades planteadas en dicha planeación.

La capacidad de crear situaciones didácticas que motiven y logren interesar a los niños por aprender es de gran importancia, y requiere de que el maestro tenga desarrolladas gran cantidad de habilidades y que domine de igual forma los contenidos con los que trabaja, ya que al lograr que el niño presente interés será un punto de partida para que él adquiera una especie de autonomía en el aprendizaje, y parte de ese interés surge de una buena organización del aula, pues en un ambiente bien organizado la atención que los niños presten a la clase será mayor, y no se perderá tiempo en distracciones, pues los alumnos no les prestaran atención, y se sentirán más seguros ya que siempre sabrán que hacer.

“la forma en que el maestro organiza el trabajo es algo muy personal, y hay muchas maneras buenas de trabajar, cada una con sus propios puntos fuertes y débiles. Ninguna forma única satisface todas las necesidades. Para que se lleve a cabo la enseñanza, es esencial que el aula este bien organizada.” (Joan Dean pp.048)

Todo lo anterior parte de las dificultades que se presentan de manera externa al trabajo dentro del aula, pero sin duda, son de gran importancia para dirigir el trabajo dentro de ella, ya que la existencia de una secuencia siempre facilitara cualquier trabajo.

Es por eso que cada planeación es única, pues aunque se estén abordando los mismos contenidos en dos grupos al mismo tiempo, las características y necesidades de ambos suelen ser muy diferentes y las actividades se deben ser adecuadas a los niños, el empleo de los recursos con los que se cuentan, y de igual forma los maestros no las pueden poner en práctica de la misma manera, y al final se obtendrán resultados totalmente diferentes.

Al llevar a la práctica las actividades previamente planificadas, nos podemos dar cuenta de la existencia de diferentes factores que pueden obstaculizarlas. En el trabajo dentro del aula y en la realización de las actividades siempre es importante conocer y responder a las dudas y cuestionamientos que se le presentan a los niños, pues si no los atendemos estos perderán el interés. Para comenzar a trabajar con un nuevo tema debemos tomar en cuenta el conocimiento que el niño ya trae a partir de un aprendizaje informal, que se obtiene fuera de la escuela, en la familia, en la interacción con el contexto o con la sociedad en general, buscando el progreso de los alumnos en cuanto a conocimiento y habilidades me refiero. La

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