ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Problemas De La Educación En Venezuela: Las Demandas De La Sociedad Y Las Ofertas Del Sistema Educativo


Enviado por   •  24 de Octubre de 2012  •  2.390 Palabras (10 Páginas)  •  656 Visitas

Página 1 de 10

Problemas de la educación en Venezuela: Las demandas de la sociedad y las ofertas del sistema educativo

http://sistemaeducativovenezolanoeeucv.blogspot.com/2009/06/problemas-de-la-educacion-en-venezuela.html

Norma Odreman Torres

Resumen

La autora propone establecer un consenso entre el Estado venezolano y la sociedad civil organizada para construir las bases de un Proyecto Educativo Nacional, que establezca las prioridades, la continuidad de las políticas y la evaluación permanente de la calidad. Plantea que desde el Ministerio de Educación deben surgir las políticas que garanticen la educación gratuita y de calidad a toda la población escolar, estimulando la permanencia de los estudiantes dentro del sistema educativo y facilitando una educación integral. Expresa la importancia de mejorar la formación de los futuros docentes, dando paso a un diseño más humano y más global donde el futuro docente descubra el ser y el deber ser de la escuela de nuestros tiempos.

Palabras Clave: educación, sistema educacional, proyecto nacional educativo

Los ciudadanos que habitan en Venezuela, aspiran a que sus hijos reciban una educación de calidad, que sean atendidos dentro de un sistema educativo que los forme para el ejercicio de la ciudadanía y para el disfrute de una vida cada vez más satisfactoria, que llegue a proporcionarles mayores niveles de libertad y de felicidad. Para hacer de este sueño una realidad, el Estado venezolano debe encontrar el camino de la equidad del sistema escolar, profundizando en la calidad. Este propósito es imposible de lograr si no se acude al consenso entre el Estado y la Sociedad Civil, es decir, si no se logra construir las bases de un Proyecto Educativo Nacional en el cual se establezcan las prioridades, la continuidad de las políticas en el tiempo y la evaluación permanente de la calidad. Es importante destacar que cualquier esfuerzo que se haga desde los espacios oficiales o privados para apoyar la educación es loable, pero la reconducción del sistema educativo con la mira hacia el 2015 y como un problema de todos, es una tarea impostergable.

Las políticas dirigidas a compensar las desigualdades económicas y culturales son competencia del Estado con la cooperación de los diferentes sectores que integran el país. Es innegable, que muchos venezolanos no tienen acceso al sistema educativo por falta de recursos económicos de sus familias o por la ubicación geográfica de sus hogares con respecto al lugar donde está escuela, y cientos de niños y niñas fracasan por falta de adaptación a la cultura escolar. Se requieren entonces, acuerdos que ayuden a delinear la escuela que queremos y necesitamos en Venezuela.

Desde el Ministerio de Educación deben surgir políticas que garanticen la educación gratuita y de calidad a toda la población en edad escolar, estimulando la permanencia de los estudiantes dentro del sistema y facilitando una educación integral que brinde formación a la persona en concordancia con el Proyecto Educativo del país. Como dice Victoria Camps (1993): "La función de la educación no es sólo instruir o transmitir conocimientos, sino integrar una cultura que tiene distintas dimensiones: una lengua, unas tradiciones, unas creencias, una forma de vida. Todo lo cual no puede ni debe transcurrir al margen de la dimensión ética que es, sin duda el momento último y más importante, no de ésta o aquella cultura, sino de la cultura humana universal."

Una arteria política de alta prioridad es la referida a la atención de los docentes. Para alcanzar mayores y mejores resultados en el proceso de enseñanza y aprendizaje es necesario impulsar desde el Ministerio de Educación, algunas líneas políticas que contribuyan a reducir el empirismo en los docentes, porque es cierto que el éxito en la ejecución de las políticas educativas descansa en gran medida en las competencias de los docentes. Por ello es fundamental, entre otras tareas:

• Descentralizar el sistema educativo, hasta el nivel municipal, otorgándole responsabilidades sobre la calidad de la educación a las comunidades y a las autoridades locales.

• Controlar el uso del sistema educativo como instrumento para el clientelismo político.

• Conceder prioridad a los niveles de educación inicial y básica desde dos perspectivas: educación de calidad, con énfasis en la formación del sujeto, y educación para la participación democrática.

• Definir un perfil de competencias que responda a la realidad social, económica y cultural de Venezuela y Latinoamérica.

• Diseñar líneas pertinentes para la formación de los docentes en universidades e institutos universitarios.

• Crear un sistema de actualización permanente para los docentes en servicio que responda a las necesidades evidenciadas en los procesos de acompañamiento realizados por los coordinadores, directivos y supervisores y, a las preferencias de los propios docentes.

• Poner en práctica un sistema de evaluación de la eficiencia docente que sirva de base a las mejoras salariales y otros reconocimientos que reciba el docente.

• Impulsar la creación de un cuerpo colegiado de supervisión educativa que vele por la calidad de la enseñanza y el aprendizaje, con énfasis en la calidad de la educación como política pública.

Es cierto que el Estado venezolano, la Sociedad Civil organizada y el Ministerio de Educación tienen mucho por hacer en pro de la educación en el país, pero lo que resultará crucial para la transformación de la educación en Venezuela ocurrirá en las aulas de los diferentes niveles del sistema. Es en el aula, donde se estimula la construcción del comportamiento social y del conocimiento académico, donde se fortalece la autoestima y se desarrollan las relaciones sociales. Pero sobre todo, la escuela es el espacio por excelencia para sembrar la esperanza y el porvenir, para impulsar el deseo de superación y la alegría de vivir.

Esta forma de entender la educación compromete a los países de América Latina a crear espacios de formación para que los docentes reflexionen y razonen sólidamente acerca del aprendizaje y la enseñanza y su actuación en estos procesos. Sobre este punto dicen Vailant y Marcelo (2001): "… Se está planteando la necesidad de incorporar en los programas de formación de profesores, conocimientos, destrezas y actitudes que les permitan comprender las complejas situaciones de enseñanza. Se insiste particularmente en fomentar en los profesores actitudes de apertura, reflexibilidad, tolerancia,

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (15.8 Kb)  
Leer 9 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com