Se Regala Marido: El Dolor Que Emana De La Violencia Contra Los Hombres

Se regala marido: el dolor que emana de la violencia contra los hombres

Por David Bitar

Eran las 11:00 de la noche, al menos esa era la hora que cree Hernando Lesmes cuando María Eugenia, su esposa, llegó a la casa llevada por los tragos y vociferando groserías. En ese momento, la mujer se quedó callada, cosa que sorprendió enormemente a Hernando.

Pasaron unos minutos y él seguía dentro de su cama sin pronunciar palabra y haciéndose el que dormía. En ese momento, su mujer entró al cuarto gritando y acusándolo de infiel. El hombre se tapó la cara con las cobijas, cuando un calor infernal lo poseyó por completo y los gritos de dolor no se hicieron esperar.

Con afán se quitó la frazada y vio a su consorte con una olla en la mano mientras le decía “Hijueputa, ahí tiene para que siga metiéndose con las mugrosas esas que consigue en la calle”. María Eugenia le vertió agua hirviendo en uno de sus brazos y parte de su cara que quedaron lesionados gravemente.

Hernando corrió al hospital del Tunal donde fue atendido. Luego de ser dado de alta, fue a medicina legal a mostrar sus quemaduras y a denunciar a su esposa por violencia intrafamiliar. Eso sucedió en noviembre del 2014 y hasta el día de hoy nada ha cambiado. Su mujer no recibió castigo alguno y después del violento episodio, y de interponer demandas, nadie se ha apersonado del caso.

A la mañana siguiente, Hernando se dirigió a la comisaría de familia de la localidad de Usaquén, esta es la que más le queda cerca. Allá se entrevistó con el Jaime Pulido quien es la persona que se encarga de este tipo de situaciones.

“Pues es que si se tratara de una mujer el trámite sería inmediato, pero como es un hombre las cosas son distintas. Lo que debe hacer antes de acudir acá es ir a la estación de Policía de la localidad y poner el denuncio, luego actuaremos nosotros”, dijo Pulido.

En ese momento acudió a la estación de Policía de la localidad donde fue atendido por una patrullera quien le recibió la denuncia por lesiones personales. Posteriormente se dirigió a la comisaría de familia nuevamente.

Sin embargo, en la Policía de Usaquén se anunció que los casos por violencia intrafamiliar, diariamente alcanzan los 15 a 20, pero en su gran mayoría son las mujeres las que denuncian y se hacen visibles. Es por esto que los casos como el de Hernando son menos, o eso se presume en la Institución.

“Normalmente quienes asisten diariamente son las mujeres las que vienen acá con laceraciones y magulladuras por parte de sus parejas. Los hombres que vienen acá, por lo general, es por riñas o inconvenientes que han tenido en otro tipo de condiciones, pero es muy raro que vengan a denunciar violencia de género”, aseguró el Teniente Coronel Carlos Andrés Hernández, comandante de la estación de Usaquén.

Ya casi era el mediodía cuando Hernando volvió a la Comisaría de Familia donde continuó con el trámite de su denuncia. Allí le dijeron que el encargado, Jaime Pulido, no se encontraba, pero que debería dirigirse a Medicina Legal donde le tomarían su testimonio y quedaría escrita la denuncia.

En efecto a la mañana siguiente, Hernando fue muy temprano hasta el Instituto de Medicina Legal ubicado en la calle 6ta con avenida Caracas en el centro de Bogotá. Allí contó lo sucedido y le tomaron su declaración.

Después de contar lo sucedido, le dijeron que se haría la investigación pertinente. Hasta este momento Medicina Legal no ha hecho ningún pronunciamiento al respecto y no le han notificado nada hasta el momento.

Pasados los días, la esposa de Hernando fue citada a la Estación de Policía de Usaquén donde se buscaría una manera de conciliar al respecto, lo que para este hombre víctima no significó nada.

“Nos citaron a una conciliación. Allá acordamos que ella no se me acercaría y que lo mejor era que empezáramos un trámite de divorcio porque los hechos ya se habían pasado de la raya. Sin embargo, nadie habló de la agresión ni de cómo la pagaría”, contó.

Lo que hasta este momento tiene sorprendido a Hernando, y a los 1026 hombres que desde 2005 están reportando en Bogotá violencia intrafamiliar y de género contra los hombres, es que los procesos se quedan en conciliaciones o denuncias que nadie atiende y que, lo peor, siguen mujeres agresivas sin pagar su crimen con la justicia.

Casos parecidos, pero donde las víctimas han sido mujeres se han resuelto de manera más efectiva y existen campañas sobre la denuncia contra el maltrato por parte de los hombres. La pregunta que surge para estas víctimas es ¿Por qué no existen leyes igualitarias para los hombres atacados por mujeres?

Pilar Acosta es una mujer de 34 años que vive muy cerca donde habita Hernando en el barrio San Antonio Norte. Ella está en unión marital de hecho desde hace casi cinco años. Ella, al igual que Hernando, recibió un maltrato físico y psicológico por parte de su cónyuge, quien en distintas ocasiones la golpeó fuertemente.

“Mi marido es celoso y su problema es una enfermedad. No permite que nadie se me acerque porque teme a una infidelidad. En alguna oportunidad ayudé a un vecino a que entrara a la casa de nosotros para que pudiera pasar un muro y entrara a su casa porque se le habían quedado adentro las llaves. En ese momento mi esposo entró a la casa y esperó a que el señor se fuera y me golpeó muy fuerte”, contó Pilar llena de angustia.

Desde ese momento los problemas de esta pareja se aumentaron considerablemente y el cónyuge de Pilar la maltrataba con golpes, insultos, agresiones y con escándalos de

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