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Sistemas Doctrinales Del Derecho Internacional Privado


Enviado por   •  11 de Diciembre de 2011  •  4.410 Palabras (18 Páginas)  •  943 Visitas

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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior

Universidad Bolivariana de Venezuela

Cabudare, estado Lara

ANALISIS Y SENTENCIA

NUEVAS TECNOLOGIAS, DERECHO Y TRANSFORMACIONES SOCIALES

TRIUNFADORAS:

Peña María Teresa

Solís Iris

Ramón Cecilia

Sección EJ 601

Semestre: Vll

Aldea Santiago Sánchez Carusi

EL MODELO CAPITALISTA

Durante la avanzada industrial del siglo veinte, se vivieron profundos cambios en la creciente sociedad. En tan solo unos años los cambios fueron drásticos, que actualmente vamos a una velocidad que no se pudiera creer, en cuanto a todas las innovaciones en tecnología e industria. La realidad se mueve, se transforma y lo hace a gran velocidad. Este contexto complejo es lo que ha llevado a la vez, que el mundo se haga pequeño, donde no hay cabida para todos, solo los favorecidos por el capitalismo tienen cabida, y el resto quedan excluidos. El concepto de exclusión engloba a la pobreza, pero más allá, podemos definir la exclusión social como la imposibilidad o dificultad de acceder a los mecanismos de desarrollo humano e inserción socio-comunitaria y a los sistemas preestablecidos de protección del estado. La existencia de sectores socialmente excluidos, en el marco de las nuevas sociedades postindustriales es una realidad ampliamente asumida, que compromete el ejercicio de los gobiernos del mundo.

Estamos viviendo cambios muy profundos en los aspectos fundamentales que han asentado la sociedad industrial avanzada del siglo XX. Desde el punto de vista productivo, el impacto de los grandes cambios tecnológicos ha modificado totalmente las coordenadas del industrialismo. Se han superado las estructuras “fordistas. Palabras como flexibilización, adaptabilidad o movilidad han reemplazado a especialización, estabilidad o continuidad. La sociedad del conocimiento busca el valor diferencial, la fuente del beneficio y de la productividad en el capital intelectual frente a las lógicas anteriores centradas en el capital físico y humano. Lo que está en juego es la propia concepción del trabajo como elemento estructurante de la vida, de la inserción y del conjunto de relaciones sociales. Y, en este sentido, las consecuencias más inmediatas de esa reconsideración del trabajo afectan en primer lugar a lo que podríamos denominar la propia calidad del trabajo disponible.

LOS COMPONENTES DE LA EXCLUSION

Desde un punto de vista estructural, podríamos ante todo afirmar que la exclusión social, como realidad de hecho, no es algo básicamente nuevo. Puede inscribirse en la trayectoria histórica de las desigualdades sociales. Con antecedentes claros –en el marco histórico de las sociedades contemporáneas- en forma de necesidades colectivas intensas, en otros muchos momentos y lugares, desde el inicio de los procesos de industrialización y urbanización masiva, durante los siglos XIX y XX. Ahora bien, la exclusión social expresa la nueva configuración de las desigualdades en el contexto actual de transición hacia la sociedad del conocimiento. La cuestión social se transforma y adquiere una nueva naturaleza en las emergentes sociedades tecnológicas avanzadas. La exclusión social es, en buena parte, el reflejo de esa naturaleza. La exclusión, en un contexto de creciente heterogeneidad, no implica sólo la reproducción más o menos ampliada de las desigualdades verticales del modelo industrial. Va más allá, la exclusión implica fracturas en el tejido social, la ruptura de ciertas coordenadas básicas de integración, en consecuencia, la aparición de una nueva escisión social en términos de dentro / fuera. Generadora, por tanto, de un nuevo sociograma de colectivos excluidos.

Si atendemos a la exclusión desde la perspectiva dinámica o temporal, podríamos decir que la exclusión es mucho más un proceso –o un conjunto de procesos- que una situación estable. Y dichos procesos presentan una geometría variable. Es decir, no afectan sólo a grupos predeterminados concretos, más bien al contrario, afectan de forma cambiante a personas y colectivos, a partir de las modificaciones que pueda sufrir la función de vulnerabilidad de éstos a dinámicas de marginación. De hecho, la distribución de riesgos sociales -en un contexto marcado por la erosión progresiva de los anclajes de seguridad de la modernidad industrial- se vuelve mucho más compleja y generalizada. El riesgo de ruptura familiar en un contexto de cambio en las relaciones de género, el riesgo de descalificación en un marco de cambio tecnológico acelerado, el riesgo de precariedad e infrasalarización en un contexto de cambio en la naturaleza del vínculo laboral... todo ello y otros muchos ejemplos, pueden trasladar hacia zonas de vulnerabilidad a la exclusión a personas y colectivos variables, en momentos muy diversos de su ciclo de vida. Las fronteras de la exclusión son móviles y fluidas; los índices de riesgo presentan extensiones sociales e intensidades personales altamente cambiantes. La exclusión social es un fenómeno multifactorial y multidimensional. No se explica con arreglo a una sola causa. Ni tampoco sus desventajas vienen solas: se presenta en cambio como un fenómeno poliédrico, formado por la articulación de un cúmulo de circunstancias desfavorables, a menudo fuertemente interrelacionadas. Tiene un carácter complejo, formado por múltiples vertientes. La exclusión difícilmente admite definiciones segmentadas. Una sencilla explotación de las estadísticas nos muestra las altísimas correlaciones entre, por ejemplo, fracaso escolar, precariedad laboral, desprotección social, monoparentalidad y género. O bien entre barrios guetizados, infravivienda, segregación étnica, pobreza y sobreincidencia de enfermedades. Todo ello conduce hacia la imposibilidad de un tratamiento unidimensional y sectorial de la exclusión social. La marginación, como temática de agenda pública, requiere abordajes integrales en su definición, y horizontales o transversales en sus procesos de gestión. No podemos dejar a la exclusión al margen de la política. La exclusión

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