El Proceso Creativo en el Diseño Arquitectónico (Lesbia González Cubillán)

El Proceso Creativo en el Diseño Arquitectónico (Lesbia González Cubillán) 

La creatividad  sido enfocada desde diversos ángulos y puntos de vista, y su ubicación dentro de un complejo sistema integrado donde otras disciplinas aportan elementos que complementan a la comprensión de dicho proceso. 

Los conceptos para dicho proceso son tres, cada término es independiente pero van entrelazados por un hilo conductor llamado energía. Los tres términos son: la creatividad, el producto creativo y el proceso creativo. La creatividad es la acción del proceso creativo. El producto creativo es el resultado visible del proceso creativo. Durante el proceso creativo la persona se puede expresar examinando su vida interior, dando una representación de sus experiencias vividas. La creatividad induce a la persona a activar su energía contenida para transformarla en un elemento primordial para la realización del proceso creativo. Gracias a la actitud creativa la persona está en constante flujo de pensamientos que van desde la percepción de lo que le rodea hasta la transformación total de aquel problema por medio del proceso creativo. 

Estos términos llevan a la conjugación de la acción del hombre que produce la acción y de la sociedad que valora el resultado de su proceso creativo. 

El Proceso Creativo tiene ciertas etapas. Se empieza con la teoría de que la creatividad es un proceso dinámico y complejo, en contraposición de la teoría de que la creatividad es la irrupción de un momento de meditación donde a la persona se le “ocurren” ideas interesantes. 

Desde este punto se así que en la creatividad intervienen otro tipo de procesos ideológicos que provienen de caracteres íntimos de la persona, emocionales y sociales, dentro de un solo grupo que da significado a la permanencia de espacio y tiempo de la obra. Por tanto la creatividad queda dentro de un marco creado por una concepción existencial y desarrollista, donde resalta la potencialidad y la energía creativa de la persona para producir obras propias dentro de una serie de condiciones existenciales y personales que le impulsan a realizarlo, sin olvidar su formación y experiencia adquirida. 

A lo largo de la historia se han creado distintas concepciones respecto a las etapas del proceso creativo, donde distintas personas, cada una con distintos tipos de vista y con conocimientos en el tema dieron sus pautas para las etapas del proceso creativo. En el ámbito de la arquitectura tenemos las etapas propuestas por Csikszentmihalyi. 

En este proceso también intervienen la energía existencial y la complejidad humana, ya que son factores propios de la naturaleza humana, y se incluyen porque van más allá de lo cognitivo, conductal y experimental, al introducirse en aspectos íntimamente relacionados con la razón existencial y con el complejo funcionamiento de la persona como entidad biológica, psicológica,

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