Martes con mi viejo profesor

El audiovisual segunda parte:

Se emite un segundo reportaje, te hablare sobre mis emociones menciona Morrie a red koppel mencionando que cuando hay gente, amigos y familia cerca de él se siente muy animado, las relaciones de amor lo sostienen, sin embargo hay ocasiones en las que se siente deprimido, pues refiere que no es fácil ir sintiendo como va perdiendo algunas de sus funciones físicas, pues aparece el cansancio, pero aun así compartió en el programa una carta de una mujer que le conmovió, haciéndolo recordar en un infancia la pérdida de su madre, hace 70 años ella había fallecido.

El profesor:

La infancia de Morrie fue dura, su madre murió cuando el tan solo tenía ocho años, su padre era ruso y no sabía leer ni hablar muy bien el inglés, Vivian en una pobreza muy grande, su hermano David fueron llevados a un albergue en donde David enfermo de polio. Morrie llego a sentir todo el peso de su familia en sus hombros pues aportaba dinero para sanar a su hermano y para su hogar, hasta que llego una mujer a su vida su madrastra Eva quien se dedico a brindarles amor de una segunda madre.

El cuarto martes hablamos de la muerte:

“Todo el mundo sabe que va a morir, pero nadie lo se lo cree”, comenzaron a hablar de este tema por el nuevo tanque de oxigeno, dejando filosofar ha ambos sobre la muerte, preguntas sobre el estar preparado para morir, hacemos lo que queremos que hacer, somos quienes queremos, Mitch pensaba que estando con Morrie él vivía el día a día, de la misma forma que él lo hacía.

 El quinto sobre la familia:

El núcleo familiar fue la lección de ese martes, el apoyo de aquellos con los que creciste, puede ayudar a solventar ese dolor y hacer l recorrido hasta la muerte más sencillo, tanto para la persona enferma como para el familiar, Mitch recuerda a su hermano menor con cáncer que alejo a todos, pensando que esa enfermedad era solo su lucha, sin darse cuenta que no solo el luchaba, si no que cada uno de los miembros de su familia cargaba parte de ella, por eso el acompañaba a Morrie en la suya.

El sexto martes sobre las emociones:

No te aferres a las cosas, porque todo es impermanente, desligarse de las cosas, generar el desapego a todo, ya que nada nos pertenece todo es parte de la vida y llega y se va a su tiempo, hay que aprender a vivir las emociones que sentimos, dejarte llevar pero no anclarte a alguna simplemente sentir, ya que si lo haces vives con miedo y eso no te deja fluir te detiene.

El profesor segunda parte:

Morrie vivió varias experiencias en diferentes trabajos, pero el hospital Chestnut Lodge, le marco, la mayoría de los enfermos mentales eran abandonados por su familia y como en la mayoría de los psiquiátricos pocos eran atendidos de la forma correcta falta de cariño, se les hacía sentir que no existían, que su riqueza no les hacia conseguir la felicidad ni la satisfacción eso es algo que Morrie nunca olvidaría y hasta sus últimos días recordaba.

El séptimo martes hablamos del miedo a la vejez:

Había llegado el momento donde moriré ya no podía ni limpiarse el trasero, le costó un poco aceptarlo, pero gracias a la filosofía de vida que lleva lo acepto, como él lo dice “Yo abrazo a la vejez, muchos le temen, pero el ya estaba dentro. envejecer no es solo decadencia es crecimiento, aquellos que desean volver a sus años de juventud no se reduce en otra cosa más que vidas insatisfechas, vidas no realizadas sin sentido. Siempre se lucha contra envejecer y eso hace infeliz porque de todas formas llega.

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