Chile en el último tiempo se ha convertido en el país con menor crecimiento dentro de América Latina

Chile en el último tiempo se ha convertido en el país con menor crecimiento dentro de América Latina, incluso por debajo de los países que se encuentran en crisis, esto ha provocado grandes efectos en el sector comercio, uno de ellos es generar la incertidumbre y la desconfianza de la empresas, como también poniendo fin a los commodities (materias primas transables en el mercado de valores), la política también se encuentra dentro de los factores que generan desconfianza e incertidumbre en los empresarios representada por un 27%, debido a que no saben que va ocurrir en el corto y mediano plazo respecto a este sector.

Otro factor más a destacar es la caída en el sector minero (el cobre), generando una alta inversión en nuevos recursos como tecnologías debido que en cuanto a lo que se sabe si el VAN de una inversión es mayor a cero, cuya inversión debiera realizarse, pero ha ocurrido lo contrario, ya que se ha logrado obtener  la materia prima a un costo más alto, y en menor cantidad, lo que significa que el menor precio del metal ha significado menor inversión de empresas y menor aumento del consumo privado, sin embargo. Lamentablemente, en los últimos años se ha visto contracción de la inversión (no sólo tecnología) por motivos de incertidumbre ante efectos de políticas internas y el agrio panorama externo.

Desde el año 2014 se ha podido contemplar las distintas Reformas impulsadas por el Gobierno, los cuales han reducido el incentivo a la inversión, una de ellas la Reforma tributaria la cual supuso el aumento del impuesto a las ganancias de las empresas, la eliminación del FUT la que permitía posponer el pago de impuestos a las ganancias, la eliminación de beneficios tributarios para la compra de viviendas, que provoco un mayor endeudamiento en la población por adquirir viviendas sin iva accediendo a créditos hipotecarios, entre otros. Lo cual tuvo como resultado disminuir las utilidades esperadas de proyectos de inversión siendo anulados o postergados, impidiendo el crecimiento de la economía nacional.

Las esperanzas de crecer hasta diciembre del año 2016 se veían preocupantemente bajas, sin embargo para este año 2017 el escenario ha ido cambiando ya que se prevé que Chile crecerá en un 2,1%, dependiendo de los precios del cobre, ya que puede cambiar oscura economía por la cual ha estado pasando el país, sin generar aumentos en ella.

Sin duda la baja en el precio del cobre afectó a nuestra economía, pero como se ha mencionado anteriormente, este efecto se amplificó por la contracción de la inversión desde el año 2014. Al respecto un conjunto de factores, en simultáneo, explican nuestro bajo desempeño a nivel país. Como también es de reconocer que es muy riesgoso que nuestro desempeño económico siga estando tan supeditado a la minería.

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