Etica Y Moral

Todos los seres humanamente racionales y éticos estamos de acuerdo en que el fin para lograr algo no justifica los medios para llegar a este, que por más que se vea inalcanzable por el ámbito moral, es de personas justas seguirlos. El caso que vive Colombia es un claro ejemplo de esto, con todos sus problemas internos de guerra, narcotráfico, corrupción y violencia común sus dirigentes se ven en la obligación de tomar decisiones drásticas y no siempre éticas, y no solo sus dirigentes sino la población civil en general en su diario vivir. El caso de la paz para ser más específicos, esa decisión poco ética por parte del gobierno de querer convertir a guerrilleros en senadores de un día para otro, bueno por así decirlo porque estas negociaciones ya parecen un crucero por el mundo. ¿Así es que se consiguen las cosas en este país? Si quiero que mis ideales sean escuchados simplemente me armo, secuestro y mato gente inocente hasta conseguirlo...

Vivimos en un país donde vivir en violencia se ha hecho parte de nosotros, no sabemos el significado de paz o lo que es vivir de manera segura. No podemos caminar por las calles luego de las once de la noche porque tememos; sea de un robo, un secuestro o una violación. Es claro que Colombia necesita un cambio en su esquema de seguridad pero el modo en como el gobierno quiere llevarlo a cabo es inaudito e inaceptable. Tenemos un gobiernos inepto que a la hora de tomar decisiones importantes sea a nivel internacional o grandes problemas nacionales se acobarda, teme de utilizar su poder para el bien de su ciudadanía, y eso es lo triste del caso, que ese gobierno solo es duro y rígido contra su pueblo. Es por esto que la población civil está tomando justicia por propia cuenta y reacciona de manera violenta, es entendible desde el punto de vista antropológico, si nadie hace nada por mi lo tengo que hacer yo mismo, pero es refutable desde el punto de vista moral puesto que para eso existe una autoridad, bueno si es que se puede hablar de moral y autoridad en este país…

Vivimos en el país donde se habla de todo pero nada se hace nada, se habla de paz, de justicia y de derechos pero ninguno de estos se lleva a cabo. Al observar la realidad en la que vivimos es evidente que como país necesitamos una revolución ética, no un cambio porque en Colombia al parecer la definición de cambio no es la misma que en el resto del mundo, aquí el cambio es un simple maquillaje, algo superficial que con el tiempo se va dañando y vuelve a la piel con

poros y huecos donde todos volvemos a caer, esos huecos al parecer sin hondo y sin salida.

Es increíble que la primera democracia participativa de Suramérica no escuche a su pueblo, que luego de ser escogidos seamos simplemente el suelo donde ellos se paran, pero esto también es culpa de nosotros por subestimar nuestro poder y desconocer las cosas que podemos hacer, la constitución es un contrato,

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