LA NONA de Roberto Cossa

LA NONA de Roberto Cossa

Introducción y Síntesis de la obra

En una familia argentina, de origen italiano, hay una abuela (la nona) de muy avanzada edad (está por cumplir los cien años). La nona come sin parar, en tanto que la familia va camino a la ruina y buscan los más diversos medios para ganar dinero (prostitución, mendicidad, engaños, etc.). En un determinado momento el último recurso que intentan es asesinarla, pero son los miembros de la familia los que van resultando muertos en esos intentos, hasta que, en el final, sólo queda la nona.

Hipótesis

La nona es una persona dominante, absorbente, arbitraria y opresiva. Abusa de una autoridad ganada por sus años, por su posición dentro de una familia estructurada, que es una metáfora de la Argentina de la época de la última dictadura militar. La obra hace un paralelismo cuando muestra como arrasa con aquello que se interpone en su camino. La Nona consume todo de vos, te destruye, es voraz, es insaciable, no tiene conciencia, no tiene en cuenta a los otros. Destruye y trae muerte, como la dictadura de la década del 70.

Pregunta

¿Puede el autoritarismo destruir una familia?

Planteo del tema

La obra fue escrita en el año 1977, en una época con cambios en el país, debido a conflictos políticos y culturales donde se pone en manifiesto la hipocresía humana, una máscara social que todo el mundo usa por miedo a desconocer quién es su propio vecino.

El tema básico es la ausencia de dinero, muestra como esto deteriora y provoca fracasos laborales, el desamor, la disolución familiar, la corrupción, la humillación. Pone en manifiesto la falta de educación, la deshumanización, la inmoralidad, la falta de comunicación y de entendimiento.

El autor es un socialista, trabajó en Clarín, fue corresponsal clandestino en Argentina de Prensa Latina en 1960 (escribía en su casa y los despachos los hacía a Montevideo) donde compartió su trabajo con Massetti y Rodolfo Walsh que tenían la tarea de mostrarle al mundo cuál era la verdad de la Revolución Cubana (movimiento de izquierda que provocó la caída de la dictadura de Batista en el 59 y la llegada al poder de Fidel Castro). La memoria social del autor muy presente en varias de sus obras, empieza, según su propio relato tomado de una entrevista de agosto de 2011 realizada por Ignacio Romero, empieza con el surgimiento del peronismo, al que siente como “un sacudón grande en la sociedad argentina, que divide al país”. Él perteneció a una familia antiperonista dice, “éramos gorilas, dice, aunque esa expresión se conoció después. En aquella época éramos los democráticos. En esos momentos las familias estaban divididas por la política entre peronistas y antiperonistas, y esas diferencias eran irreconciliables. Algunos culpaban a Perón hasta cuando llovía mucho”, dice. En 1970 escribió “El avión negro” que trataba el tema del avión en el que Perón regresaría del exilio. Acá aclara que no fue peronista, pero que pasó de un antiperonismo primario de la adolescencia a entender algunas cosas; y que valorizó mucho la figura de Eva por lo que aportó desde lo social, no así la de Perón, de quien opina que es un fascista desde el punto de vista filosófico, un militar que no podía abandonar su condición de militar, de casta, de clase. En 1971 entró a trabajar en el Diario La Opinión, ocupándose de la parte política, hasta que diferencias con sus dueños lo hicieron renunciar. Más tarde trabajó en El Cronista Comercial hasta 1976. Deja el diario en un momento convulsionado de la vida política argentina y comenta que “me retuvo en el país el teatro, porque es una actividad grupal y estando acompañado hay menos miedo”. En agosto de 1977 estrenó La Nona, que en su última parte fue escrita durante el lopezreguismo y el comienzo de la dictadura; es decir, la muerte estaba ahí, muy presente.

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