Mujer: ídolo Encantado O Esclava Domestica

Mujer: ídolo encantado o esclava doméstica

Al hablar de la mujer en épocas renacentistas nos encontramos una mujer totalmente opuesta a la de hoy en día, no solo por su forma de vestir o de expresarse, sino también por la represión que se ejercía sobre ellas, por culpa de la sociedad que el hombre había implantado para su propio beneficio, ya que prácticamente se afirmaba que el papel de la mujer se centraba en tres características: la limpieza de la casa, el cuidado de la familia y la satisfacción de los placeres del hombre.

El presente ensayo realiza una descripción alusiva a aspectos pertenecientes a la mujer renacentista; intentando retomar a la mujer en dos representaciones de diferentes épocas, la primera relacionada a Casilea de Vandalia nombre legendario del quijote, esta no voz ni voto en aquel libro pero Guiomar Cuesta le pone voz, y en segundo término a la mujer actual. Logrando un paralelo entre ciertos aspectos, los cuales a través de los años han evolucionado gracias a expresiones como la libre generación femenina, al cambio de pensamiento del hombre hacia la mujer, y al reconocimiento en transición de las capacidades de las mujeres y su desenvolvimiento en terrenos y profesiones que solo habían sido abordados por el hombre.

Cuando se habla de la imagen de la mujer en la época del renacimiento, la mente lleva a un lugar en común, una mujer sin emancipar, bien sea una dama que es sumisa ante su esposo, entregada a su familia o bien sea como un ser de pureza que entrega su vida a la oración y al quehacer religioso. Claro que no se podría generalizar, ya que como todo existe una excepción a todas aquellas alusiones, pero por lo general una esclava “las Mujeres de los siglos XVII y XIX se quedan atrás sin mas papel que custodiar las virtudes familiares, mientras el hombre gana derechos libertades políticas y posibilidades de acceso a la cultura” , además de ser esclavas sus maridos ellas eran esclavas de si mismas, reprimidas y subyugadas, y su voz no era escuchada.

Casildea De Vandalia sufría prácticamente algo similar “jamás permitió que llegara a mi el verbo tuve cosida mi boca por los siglos de los siglos y mi nombre jamás brillo con luz propia" , pero esta dama no era callada por su esposo, sino por el escritor que al no verle importancia a esta dama la deja sin voz ni voto, solo nombrada y reprimida ante otro hombre el Señor del Bosque, el cual solo la nombra como su enamorada. La historia cambia cuando se da su emancipación, y lejos de los condicionamientos que tenía, deja desbordar lo que sentía realmente, haciéndonos conocer a la mujer ligada a algo más que a la idea de la sumisión, el amor maternal y el servicio, logrando la libertad a través de su independencia, y de hablar con su propia voz, haciendo saber lo que murmuraba el Señor del bosque la hería como una

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